El nombramiento de Guillermo Escalza Bittini como director del colegio Heidelberg, en Barranco Seco, es noticia grande por lo que tiene de reconfortante. Elegido para sustituir a un enorme profesional de la enseñanza, a Miguel Solaesa, Guillermo es de esos profesores que convocan a la unanimidad: por su entrega, por su sensibilidad con cada alumno, por la capacidad de contacto, por el placer del trabajo bien hecho. Un lujo es lo que va a tener ese colegio en la dirección. Cuando denunciamos pobreza en la sociedad civil y miseria en la política, va un colegio y da el campanazo de poner al frente al mejor. Suerte.