Uno de los motivos por los que José Carlos Mauricio no contesta a nuestras llamadas ni permite que su Gabinete de Prensa cumpla con su obligación es que lo descubrimos en su día viajando a Nueva York, en primera clase y con todos los gastos pagados, para conocer un proyecto de urbanización de Veneguera. Lo trató de desmentir, pero teníamos hasta el localizador de Iberia y tuvo que reconocerlo. No ha sido ni será el único viaje que, por motivos empresariales, ha realizado y realizará el señor Mauricio, muy dado últimamente sólo a eso, a resolverle los problemas a la clase empresarial canaria. Nada más tomar posesión de su cargo de consejero de Economía y Hacienda viajó a Marruecos, pero no crean que fue para resolver el problema del tráfico de personas, ni el del tomate, o el de la pesca. No, fue a hablar de cemento.