Cuatro días para ver lo mejor de El Cairo: El barrio copto y las mejores vistas sobre el Nilo

Entrada al Barrio Copto de El Cairo. En la imagen puede verse la gran cúpula de la Iglesia de San Jorge.

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Pocos saben que la identidad histórica de Egipto también se construye a través de una importantísima presencia del cristianismo que tuvo su punto álgido durante los tiempos en los que el país del Nilo estuvo bajo la influencia del Imperio Bizantino (durante los siglos V y VI). La conquista islámica del país supuso un punto de ruptura de la cristianización de estas tierras y dejó a Egipto bajo la órbita musulmana. Pero la presencia del cristianismo, sobre todo en su concepción ortodoxa, siguió siendo más o menos importante y ha perdurado hasta nuestros días. En El Cairo, esta huella se deja sentir con mucha fuerza en el ‘Barrio Copto’ (así es como llaman a los cristianos), un trozo del viejo El Cairo donde las iglesias dominan el paisaje urbano entre los últimos restos de la presencia de Roma en la capital (puedes ver los monumentos sugeridos marcados con iconos de color verde). Un rincón a orillas del río que nos permite conocer esta parte importantísima de la identidad egipcia.

La mejor manera de llegar hasta el Barrio Copto es el metro (Línea 12 -rojo- estación Mar Girgis) que te deja justo en frente de la Fortaleza de Babilonia. Esta torre circular es lo que queda de una antigua ciudadela construida por los romanos a principios del siglo IV para controlar el paso de las embarcaciones que ingresaban o salían del Delta. La antigua fortaleza es el germen de la ciudad. Los romanos construyeron un fuerte más primitivo sobre una torre persa anterior y ahí nació El Cairo. Hasta el punto de que los antiguos muros del recinto fortificado marcan los límites del Barrio Copto.

Opus Mixtum en la Torre de Babilonia. Los romanos idearon este sistema de construcción que alterna hiladas de piedra y ladrillos para abaratar costes y acelerar los tiempos de construcción.

La Fortaleza de Babilonia marca la puerta de entrada a un espacio laberíntico donde se pueden ver esas huellas de la ciudad primitiva antes de que se convirtiera en la gran ciudad del orbe musulmán. El monumento más significativo del barrio es la llamada Iglesia Colgante (Santa María Virgen), un templo que se agarra a las antiguas torres de la puerta sur del fuerte romano y aparece como colgada de los muros. La iglesia es bonita por fuera y bellísima por dentro (repleta de mosaicos dorados que adornan casi cada centímetro cuadrado de piedra y estuco.

Maravilla hecha en ladrillo. Interior de la Basílica de los santos San Sergio y San Baco. Barrio Copto de El Cairo.

Más allá de la Iglesia Colgante, en el barrio copto hay otras iglesias cristianas de interés pero si hay que elegir hay que visitar dos más: San Sergio y San Baco (siglo VI) y Santa Bárbara (siglo XII). La persistencia de las iglesias ortodoxas en El Cairo después de la conquista musulmana pone de manifiesto la tolerancia de las nuevas élites con las llamadas religiones del Libro (cristianismo y judaísmo). En este barrio copto también puedes visitar la Sinagoga de Ben Erza, un templo judío muy antiguo (siglo XI) que tiene una curiosa relación con España: fue uno de los puntos de reunión de los sefardíes expulsados que se instalaron en El Cairo.

Iglesia Colgante. Este templo copto se 'sube' sobre las antiguas fortificaciones romanas creando la ilusión de estar elevada. Es uno de los edificios más bonitos del Barrio Copto de El Cairo.

El Museo Copto (Mari Gerges, 3).- El museo contiene las colecciones cristianas de los museos estatales egipcios y es un ejemplo de la fuerte cohesión de la comunidad copta del país (en torno al 10% de la población) que donó sus reliquias, iconos y piezas artísticas antiguas para crear este centro. El gran tesoro del museo son los manuscritos de Nag Hammadi, una serie de textos de los siglos III y IV que hablan del gnosticismo de los primeros cristianos. El texto más importante de esta colección de manuscritos es uno de los evangelios no canónicos (el de Tomás). El museo es interesante.

Sala de oraciones de la Mezquita Al Amr. Este fue el primer templo islámico en el norte de África tras la pérdida de Egipto por parte del Imperio Bizantino.

La primera mezquita de África.- Dicen que desde este lugar relativamente elevado se dirigió la conquista de la pequeña ciudad bizantina bajo la batuta del victorioso Amr ibn al-As, uno de los militares artífices de ese siglo victorioso en el que el Islam desbordó los límites de la Península Arábiga y conquistó medio Mediterráneo. El lugar que ocupaba la tienda de campaña del general se convirtió en la primera mezquita construida fuera de Arabia: la Mezquita Al Amr (Sidey Hassan Al Anwar). Estamos ante el templo islámico más antiguo ya no sólo de Egipto, sino de África. La obra original es de aquel siglo I de la hégira (siglo VII) se fue convirtiendo en una enorme obra de arte que muestra la hermosa simpleza de los primeros tiempos del islam. Es un monumento imprescindible para comprender la historia de la ciudad.

Columna del Nilómetro en la isla de Al Manial. Más allá de su interés científico para medir las crecidas del río, este recinto servía para calcular la producción agrícola del año y fijar los impuestos a los campesinos.

El Nilómetro y la isla de Al Manial.- Terminamos este paseo por la zona sur del viejo El Cairo pasando sobre las aguas del Nilo a través del Puente de Manial, una curiosa pasarela peatonal que sirve para acercarse hasta la Isla de Manial, desde donde vamos a disfrutar de las mejores vistas sobre el río en la capital cairota. El punto fuerte de esta isla está justo en su extremo sur (a dos pasos del puente). Aquí puedes ver el famoso Nilómetro de Roda (Al-Miqyas), un pequeño edificio que alberga una curiosa columna que servía para ir calculando las subidas periódicas del río. Esta infraestructura hidráulica se construyó en el siglo XI por orden del califa abasí al-Mutawakkil. Es el edificio musulmán más antiguo de los que se conservan y este cuidado con el que se ha tratado a lo largo de los siglos tiene que ver con su función: a través del cálculo de las crecidas se establecían los impuestos que se cobraban cada año.

Sala del palacio Manasterly en la ciudad de El Cairo.

Ahí junto al Nilómetro de Roda tienes otros dos lugares de interés: el Palacio Manasterly (El-Malek El-Saleh), una magnífica residencia palaciega de finales del siglo XIX que es una maravilla y una pequeña terraza sobre las aguas del río puedes disfrutar de una de las mejores vistas urbanas de El Cairo: ahí con el río siendo el protagonista absoluto del paisaje. Otro lugar interesante de la Isla (aunque bastante más al norte) es el Palacio Manial (Al Saraya, 1). La residencia del príncipe Muhammad Ali Tawfik se construyó a principios del siglo XX justo en el momento en el que se producía el colapso del Imperio Otomano. El edificio es bellísimo y merece la pena ir a visitarlo (y también sus impresionantes jardines).

Fotos bajo Licencia CC: Fabio Achilli; Francisco Anzola; Andrea Kirkby; Richard Mortel; Saulo Alvarado; Edgardo W. Olivera

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