La cultura afronta su peor año en la región con el Festival de Almagro, Abycine y Estival Cuenca entre lo mejor valorado

Pocos sectores se han librado de las consecuencias de la pandemia de coronavirus, pero el cultural ha sido uno de los más devastados según todas las estadísticas. No obstante, numerosos eventos han conseguido celebrarse de manera limitada y con restricciones y por ello la Fundación Contemporánea ha vuelto a realizar su Observatorio de la Cultura correspondiente a todo el año 2020. En el caso de Castilla-La Mancha, sitúa de nuevo al Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro entre lo mejor del año -y en el décimo puesto a nivel nacional-, seguido del Festival El Greco, el Festival de Cine Independiente de Albacete Abycine y de novedades como Estival Cuenca.

En el informe “La Cultura en España 2020” han participado 472 miembros de un panel de profesionales de la cultura, que respondieron el pasado mes de diciembre a un cuestionario valorando el impacto de la pandemia en el sector cultural y su avance en la transformación digital, así como las instituciones y acontecimientos culturales más destacados del año a pesar de las dificultades en que se han desarrollado.

Conforme a estas votaciones, a los cuatro eventos mencionados les siguen las llevas a cabo en otras tantos espacios culturales como el Monasterio de Uclés, la Fundación Antonio Pérez, el Museo de Arte Abstracto y la Colección Roberto Polo. También figura la Fundación Juan March, con sede en Cuenca, Madrid y Palma de Mallorca.

Consecuencias de la pandemia

Aunque la Fundación ha querido mantener su ranking anual, lo cierto es que en el informe se vislumbran las consecuencias de la pandemia, sobre todo por la limitación de aforos y actividades. El sector ha perdido el 29% de sus ingresos en 2020 y prevé perder hasta un 35% en 2021; y también ha destruido empleo en el 60% de las organizaciones culturales. No obstante, la transformación digital se ha convertido en “una apuesta de futuro” impulsada por la crisis.

Concretamente, hasta un 81% de los encuestados dice tener menos público por limitaciones de aforo, mientras que solamente un 9% ha recuperado totalmente su público. Otros datos significativos es que en un 49% de los centros culturales siguen parcialmente en teletrabajo y un 37% mantiene aún parte de la plantilla en ERTE, mientras el 59% reconoce haber reducido plantilla como consecuencia de la pandemia. También un 10% de los profesionales independientes declaran haber perdido ellos mismos su empleo.

La caída de ingresos, según el informe, es mayor que la media en el sector privado (35%) y entre los profesionales independientes (38%) que en el sector público (22%). Tan solo el 14,9% del sector privado ha conseguido mantener sus ingresos, mientras para un 45% las caídas han sido superiores al 40%.

Transformación digital, sí o sí

De cara al futuro, un 61% declara estar desarrollando un plan integral de transformación digital, con impacto en contenidos, formatos, comunicación, financiación y organización. A su vez, un 45% continúa implantando un plan elaborado antes de la pandemia. Pero los planes de transformación digital no cuentan siempre con un presupuesto, por lo que la mayor voluntad inversora (66% de los panelistas) se destina a la producción de contenidos digitales, a equipamiento y software (45%) y a publicidad y comunicación digital (40%); mientras que la inversión en personal o asesoramiento externo para proyectos digitales no llega al 30% de los casos.

Finalmente, los encuestados muestran un elevado consenso en que la “digitalización forzosa” les ha ayudado a identificar oportunidades de futuro. Consideran que cuando los proyectos vuelvan al formato físico, no van a renunciar a un complemento digital, aunque tienen dificultades para identificar modelos de financiación para proyectos digitales y pocos creen que el paso a digital suponga perder parte de sus patrocinios actuales.

Creada por La Fábrica en 2008, la Fundación Contemporánea tiene como objetivo contribuir al desarrollo de los profesionales de la cultura, a través de actividades de encuentro y formación de profesionales, apoyo a emprendedores y fomento de la colaboración entre organizaciones culturales públicas y privadas.