El secretario general del PSOE de Castilla y León y candidato a la Junta, Carlos Martínez, ha pedido disculpas este jueves por las declaraciones realizadas durante el acto del partido celebrado el pasado domingo en León, en las que ironizó sobre las críticas que recibe por su modo de referirse a la comunidad como Castilla-León.
“No fue un chiste ni una mofa; fue algo involuntario, sin intención de ofender ni de herir ninguna sensibilidad”, ha asegurado Martínez, quien ha reconocido que “no le cuesta pedir perdón cuando se equivoca, aunque sea de forma involuntaria”.
El líder socialista ha insistido en que siente un “profundo respeto por la sociedad leonesa”, a la que ha definido como “una de las grandes damnificadas por el Gobierno autonómico en los últimos años”, y ha lamentado que “se haya intentado tergiversar” el sentido de sus palabras.
Martínez ha apuntado que la polémica generada “le viene muy bien al Partido Popular”, al que acusa de “retorcer la realidad para falsear la voluntad de lo que se dice y desviar la atención de los problemas reales”. En su opinión, “la auténtica falta de respeto” hacia León “es el abandono institucional” que, a su juicio, ha sufrido la provincia durante los gobiernos del PP. “Todos somos conscientes de que a León solo le irá bien con un gobierno socialista al frente de la Junta de Castilla y León”, ha apostillado.
“Soy consciente de que estamos ya en campaña electoral y que van a aprovechar cualquier ocasión para darle la vuelta a la tortilla, pero lo que no se puede cuestionar es el compromiso del PSOE con León”, ha subrayado el dirigente soriano, que ha reconocido también que “quizá deba ser ”menos ingenuo en algunas cuestiones“.
Martínez ha reiterado que su proyecto político pasa por “una Castilla y León unida, de nueve provincias, con voz propia y un futuro compartido”, frente a lo que considera “el modelo de división territorial” que ha fomentado el PP.
Precampaña electoral
Las disculpas de Martínez llegan en plena precampaña electoral autonómica, tras un acto en León en el que el PSOE quiso escenificar su arranque de ciclo político con la presencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. La elección de la capital leonesa no fue casual: los socialistas confían en recuperar terreno en una provincia donde el leonesismo mantiene una creciente influencia y el PP todavía arrastra desgaste por su gestión de los incendios del pasado verano.
Sin embargo, la intervención de Martínez acabó desatando una tormenta política. Durante su discurso, el candidato socialista ironizó sobre las críticas que suele recibir por decir Castilla-León en lugar de Castilla y León, y apuntó: “Y me critican por decir Castilla-León seguido; me dio un truco Rebeca, habrá que decir Castilla y León y Soria y Burgos. Y Valladolid y Segovia”.
El comentario provocó una cascada de reacciones, especialmente en redes sociales, donde los activistas leonesistas le acusaron de menospreciar la identidad de la región. La polémica creció después de que el alcalde de León, José Antonio Diez (PSOE) —ausente del acto, según él, por no haber sido invitado— calificara de “mofa” las palabras de Martínez y las considerara una falta de respeto a las “reivindicaciones históricas e identitarias” de la provincia.
Auge del leonesismo
El leonesismo, representado políticamente por la Unión del Pueblo Leonés (UPL), vive un momento de auge simbólico: ya 71 municipios de la provincia han aprobado mociones a favor de una autonomía leonesa junto a Zamora y Salamanca, con apoyo de concejales de UPL, PSOE y PP.
Desde el entorno del candidato socialista se insiste en que el error fue fruto de la rapidez con la que habla y no de una cuestión ideológica. No obstante, varios sectores del propio PSOE leonés consideran “difícil de entender” que Martínez vuelva a tropezar con un asunto que despierta tanta sensibilidad, especialmente cuando el partido busca consolidar su espacio frente al regionalismo leonés y a formaciones localistas como Soria ¡Ya!.
Martínez, que asumió el liderazgo del PSOE en la comunidad tras relevar a Luis Tudanca, ha hecho de la unidad entre provincias una de las banderas de su proyecto político, frente a lo que denuncia como “nueve proyectos distintos” fomentados por el PP. Aun así, su discurso de cohesión territorial ha quedado esta semana eclipsado por una letra: la “i griega” que, cuatro décadas después de la creación de la comunidad, sigue marcando el pulso identitario entre Castilla y León.
El secretario general del PSOE de Castilla y León, Carlos Martínez, ha reiterado sus disculpas por las declaraciones realizadas el pasado domingo en León en las que ironizó con las críticas que recibía por su modo de referirse Castilla y León, y ha asegurado que “no fue un chiste, ni una mofa, fue algo involuntario sin intención de ofender a nadie ni herir ninguna sensibilidad”, ha explicado.