Ribó propone reducir el ruido de los campanarios denunciados por molestias

“Queremos establecer un diálogo porque no tenemos nada contra las campanas, pero hay que entender que hay que buscar una salida porque hay vecinos que han protestado y que han presentado denuncias ante el Síndic de Greuges que nos obligan a tomar medidas”.

Así se ha pronunciado este miércoles el alcalde de Valencia, Joan Ribó, con respecto a la polémica suscitada por las notificaciones enviadas a por el Ayuntamiento a varios campanarios, entre ellos los de San Nicolás y San José de la Montaña, requiriéndoles que dejen de tocar las campanas por las molestias que generan a los vecinos.

En este sentido, Ribó ha recordado que la ordenanza de Contaminaciópn Acústica establece unos límites sonores que no se pueden sobrepasar, pero se ha mostrado dispuesto a buscar soluciones sin que ello implique que dejen de darse los toques.

El alcalde ha explicado que existen mecanismos para lograr que los decibelios de las campanadas se reduzcan y se adapten a los límites que establece la ordenanza: “Hay sistemas eléctricos que pueden reducir la intensidad de las campanadas, también se puede reducir la masa del partillo que toca la campana”.

Ribó ha insistido en que están dispuestos a trabajar en la búsqueda de una solución de consenso, pero “los que tocan las campanas deben de entender que si hay una ley y se presenta una denuncia en la que el Síndic de Greuges nos insta a actuar, tenemos que actuar”.