La directora, actriz, guionista y escenógrafa Eva del Palacio ha reclamado más teatro de calle pero “de calidad” y “sin intrusismos”, ya que considera que están proliferando “agencias” que han visto un nicho de negocio en las artes escénicas como es el caso de actividades para los colegios.
En entrevista con la Agencia Efe en Olmedo, donde participa en el festival de teatro, defiende que “no todo vale”, ya que “es contraproducente” admitir espectáculos que realizan personas sin apenas formación que “lo que van a hacer es alejar al público en vez de acercarle, que es el ”leitmotiv“ del teatro de calle”.
Eva del Palacio acumula casi 35 años de trayectoria con “Morboria teatro”, una empresa “familiar” en la que trabaja junto a su marido, Fernando Aguado, y sus hermanos, Ana y Trajano, que intentan “revalorizar” cada obra que ponen en escena con el gran trabajo en el que se apoyan, que abarca todos los ámbitos.
Ver una pieza de “Morboria” supone poder disfrutar de colorido, de la energía de los actores, de una gran comicidad, de un rico vestuario, con trajes, sombreros y zapatos que son una joya artesanal, como se puede apreciar en “El enfermo imaginario”, de Molière, que esta noche interpretarán en “Olmedo Clásico”, detalla la directora y actriz.
Aunque la estrenaron en marzo de 2006, la han vuelto a recuperar para dar “otra vuelta” a esta “obra maestra” de Molière, con nuevos actores, más música en directo con piezas originales de la época, y con la experiencia que ha aportado el paso de los años a los protagonistas, para ver la enfermedad y la muerte desde otro prisma, reflexiona.
Defiende que “El enfermo imaginario” no solo es una comedia, sino que cuenta con un importante componente trágico a través de la hipocondría de Argán y, con ella, una dura crítica a la medicina de la época y, trasladado a la actualidad, a las farmacéuticas, “que aprovechan el miedo a la enfermedad y la sobremedicación”.
También hay guiños a la actualidad política “y con una palabra que se diga, ya encuentras la complicidad del público”, refiere Eva del Palacio, una habitual del festival olmedano, en el que participó ya desde su primera edición, y al que acude prácticamente todos los años para aportar su bagaje profesional.
Lleva toda una vida entregada al teatro, con un trabajo “titánico” que no todo el mundo es capaz de valorar, “porque se desconoce lo que hay detrás de una obra”, sobre todo, en una compañía como “Morboria”, que hace de cada detalle un producto único y que les llevará en breve a Montpellier para representar un cuidado trabajo de teatro de calle.
“Este año, al mirar la programación del festival de Almagro, por ejemplo, me quedé apabullada al leer que existen casi 4.000 compañías teatrales...Otra cosa es que puedan vivir de lo que hacen, pero está claro que cada vez surgen más iniciativas y que se está revalorizando el teatro clásico español”, concluye.