El Gobierno vasco de PNV y PSE-EE ha dado por “zanjada” la crisis en Euskal Irrati Telebista (EITB) y mantiene su respaldo a la cuestionada directora general, Maite Iturbe, de nuevo en el ojo del huracán tras la emisión de un espacio de entrevistas que recogía comentarios denigrantes para los españoles. Según ha explicado este martes el portavoz del Ejecutivo, Josu Erkoreka, PNV y PSE-EE ven “suficiente” que Iturbe haya “pedido disculpas” por las ofensas vertidas en el espacio ‘Euskalduna naiz, eta zu?’ dedicado a España (hubo otras entregas sobre sexo, por ejemplo) y que exista ya un “compromiso” de “implantar las medidas de control que impidan la reproducción de este tipo de situaciones”.
Erkoreka, tras la reunión semanal del Consejo de Gobierno, ha querido remarcar que “la posición” del gabinete de coalición ha sido “clara desde el primer momento”. Ha citado que se envió un comunicado “rechazando los contenidos del programa” y que él mismo como portavoz y el lehendakari, Iñigo Urkullu, han coincidido en considerar ofensivos algunos comentarios. Ha añadido también que se ha reclamado a la dirección de la radiotelevisión vasca “una revisión de los métodos internos de control, que no han sido capaces de detectar que se haya emitido un programa de estas características”.
El PSE-EE, partido coaligado con el PNV y que en el pasado fue muy beligerante con la gestión de Iturbe en EITB, fue de los primeros en criticar el contenido del polémico espacio cuando un resumen se hizo popular en redes sociales el pasado sábado por la mañana. Según Erkoreka, ambos partidos mantiene una postura “unánime” dentro del Gobierno y comparten “una actitud crítica” hacia lo ocurrido. Fuentes socialistas confirman que entienden que el lehendakari ha liderado una respuesta “tajante y contundente” y ven “zanjada” la crisis con la predisposición de Iturbe a revisar los mecanismos de “control” interno.
En todo caso, de cara al futuro inmediato del ente público, el Ejecutivo autonómico ha querido recordar que el Parlamento Vasco ha puesto ya en marcha una ponencia para repensar el modelo de EITB, que vive sumida en la mayor crisis de audiencia de su historia. “Habrá ocasión y oportunidad de debatir los cambios”, ha zanjado Erkoreka.
Los periodistas han cuestionado al portavoz del Ejecutivo vasco por algunas iniciativas políticas que pretenden elevar esta polémica a los tribunales para que diluciden si se ha cometido un “delito de odio”. “Si se apela a la Fiscalía o se plantean querellas, pues serán los jueces los que se pronuncien. Pero el Gobierno sí cree que, se haya acertado o no con el humor, que es evidente que no, es más complicado inscribir estos contenidos en el marco de un delito de odio. Veo difícil incardinarlo”, ha apuntado Josu Erkoreka.