PNV y PSE-EE ultiman con Podemos e IU los presupuestos en Álava después de desbloquear el conflicto en las residencias

En Álava, como en Gipuzkoa, el Gobierno foral de PNV y PSE-EE no tiene mayoría y precisa de un tercer socio para sacar adelante presupuestos y otros grandes proyectos. Y en Álava, como en Gipuzkoa, el bipartito está mirando a la izquierda para encontrarlo. Si esta semana se ha confirmado el acuerdo entre Eider Mendoza y Podemos, Ramiro González ultima también una alianza con ese partido, aunque en el caso alavés se mantiene la coalición con IU (Elkarrekin).

Este jueves y viernes, en dos tiempos, la Diputación ha salvado un 'match ball'. Elkarrekin había reclamado una solución al conflicto laboral de las residencias antes de sentarse a cerrar un posible acuerdo económico para 2026. Se trata de un sector altamente privatizado, precarizado y feminizado. Acumula seis años de movilizaciones y seis decenas de jornada de huelga. González dio cuenta este jueves ya por la noche, a las 20.40 horas, de la “buena noticia” del acuerdo entre patronal y sindicatos hasta 2028, cubierto con una inyección de algo más de 10 millones de euros de fondos forales para atender subidas salariales de más del 30% que dejarán en 1.500 euros mensuales la nómina ordinaria de una gerocultora.

El propio González explicó que este movimiento hacía que Elkarrekin retirara su enmienda de totalidad a los presupuestos. El Parlamento foral, las Juntas Generales, votaba este viernes las peticiones de devolución de las cuentas y, si Podemos e IU hubiesen operado como EH Bildu, PP y Vox, el Gobierno habría perdido la votación y el proyecto se hubiese quedado en nada.

Finalmente, no ha sido así. González ha salvado el trámite de totalidad con el balón de oxígeno de última hora de Elkarrekin. Pero el partido no ha terminado. La próxima semana, lunes y martes, se tramitarán las enmiendas parciales. Es el momento decisivo para que cristalice el pacto de PNV y PSE-EE con Elkarrekin. El fin de semana se negociarán los detalles y ese día se introducirán los cambios exigidos por la coalición de izquierdas con respecto a la propuesta inicial del Ejecutivo foral, de 727 millones. El plazo es corto y tocará apurar los contactos. Si nada se tuerce, después solamente quedaría ratificar ese dictamen en pleno y el 1 de enero Álava tendría presupuestos actualizados.

“Este acuerdo de las trabajadoras de las residencias era una condición 'sine qua non' para que Elkarrekin entrara a negociar estos presupuestos. Anoche retiramos nuestra enmienda a la totalidad, que era un ultimátum”, ha confirmado el portavoz de Podemos, David Rodríguez. Pero insiste en que, de momento, el proyecto de PNV y PSE-EE todavía “no atiende a las necesidades del territorio” y buscarán mejorarlo con sus 71 enmiendas.

En 2025, PNV y PSE-EE encontraron en EH Bildu un aliado en Álava, aunque en Gipuzkoa en aquella ocasión fue el PP. Ahora, la formación abertzale considera que el Gobierno foral ha operado de modo “prepotente”, sin voluntad de acercamiento. Precisamente, hace doce meses se introdujeron 6 millones para el conflicto de residencias, que luego se mejoraron hasta 9 y que ahora superan ya los 10 en el nuevo escenario. El PP, de su lado, ha criticado que nacionalistas y socialistas solamente miren “a la izquierda radical”. “El año pasado fue con EH Bildu y este año parece que se lo ha puesto más fácil a Podemos [e IU]”, ha dicho Iñaki Oyarzábal.

El debate sobre las residencias, en todo caso, ha abierto una brecha sindical entre ELA y LAB. Los primeros han ratificado en asamblea el nuevo convenio y considera que “es fruto de la lucha incansable de más de seis años que han protagonizado las trabajadoras del sector, con las casi 60 jornadas de huelga”. Pero LAB ha lamentado que ELA no ha actuado desde la “unidad” del personal afectado y ha avisado que el nuevo marco “debe garantizar un cierre a la altura de la lucha que las trabajadoras han llevado adelante”.