Bridge se venga de Terry, y de paliza

Las miradas se centraron en Terry y Bridge durante 40 minutos, que fue lo que tardó en romperse el encuentro con el gol de Lampard. El 2-4 final del marcador quizá es excesivo, pero la victoria de los visitantes es lo más justo después de lo visto en el terreno de juego.

El partido empezó muy parado, lento y con los dos equipos expectantes ante lo que hacía el rival. Así parecía que se iba a llegar al descanso hasta que un magnífico balón interior de Ballack, lo definió de manera brillante el inglés Lampard adelantando a su equipo en el marcador. Sin embargo, cuando todos pensaban que los locales se irían al descanso con ventaja, llegó la jugada del 'Apache' que rompió a Carvalho y batió por bajo a Hilario llevando las tablas al marcador antes del descanso.

La reanudación fue bien distinta. El ritmo del encuentro subió, y así una cabalgada de Bellamy por la izquierda, definida maravillosamente por él mismo, ponía por delante a los visitantes contra todo pronóstico. El Chelsea se volcó y en una nueva contra del inglés, Belleti lo derribaba dentro del área lo que suponía penalti y expulsión. La pena máxima se encargó de transformarla de nuevo Tévez. Con 1-3 en el marcador y un hombre menos, los blues' lo intentaron pero casi sin convicción. Poco después, Ballack se autoexpulsó por la impotencia y dejó a su equipo con 9 por una durísima entrada.

De ahí al final, el partido se convirtió en un correcalles que terminó con el cuarto del City en una contra que empujó a placer al fondo de la portería Bellamy. Al final, un penalti sobre Anelka lo transformó Lampard haciendo el definitivo 2-4. El Chelsea se queda líder con sólo un punto de ventaja sobre el United, y el City se aupa a la cuarta plaza adelantando al Tottenham, eso sí, con un partido más.