Calahorra transforma el monumento a los agricultores en un refugio climático

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Un refugio climático es un espacio seguro diseñado para proteger a las personas, animales y ecosistemas ante fenómenos climáticos adversos, como olas de calor, tormentas intensas, inundaciones o sequías. Estos refugios pueden ser desde instalaciones construidas específicamente para la emergencia, hasta áreas naturales que funcionan como amortiguadores climáticos. Y Calahorra ya tiene el suyo porque el Ayuntamiento de la localidad ha convertido el monumento a los agricultores, en el parque de la Era Alta, en un refugio climático para este verano.

A través de un comunicado, desde el Consistorio calagurritano relatan que se trata del primer punto de la ciudad para sofocar el calor veraniego en Calahorra aunque están valorando “y estudiando la posibilidad de acondicionar más refugios climáticos”.

E Plan de Actuación Integrado ‘Calahorra impulsa: donde el pasado inspira al futuro’ incluye una partida de 300.000 euros para la creación de refugios climáticos en las plazas de los Comuneros de Castilla y Monasterio de Yuso y en las calles Teniente Palacio y José María Medinaveitia con la plantación de más árboles, la instalación de fuentes y más zonas de sombra para que sean lugares “donde la gente pueda disfrutar en cualquier época del año, sin que el calor extremo sea un problema”. Para llevarlo a cabo el Ayuntamiento de Calahorra ha solicitado una subvención al Ministerio de Hacienda, a través de fondos FEDER.