Calahorra ya está en Marte. Y todo gracias a un científico estadounidense, Jim Rife, que descubrió un cráter en el planeta rojo y que decidió ponerle el nombre del municipio riojano rindiendo así un pequeño homenaje a su bisabuelo. A Rife no se le olvidaron sus orígenes. Su bisabuelo era de Calahorra y parte de su familia emigró a Estados Unidos a finales del siglo XIX. Ahora quiere recuperar su rostro histórico. En los archivos ya se ha descubierto que sus bisabuelos paternos eran Felipe Jiménez y Javiera Obanos. Rife ya ha sido invitado por el Consistorio calagurritano a visitar la ciudad.