El malestar es evidente en el seno del Partido Popular de La Rioja, también en el propio Gobierno. La noticia de la compra de varios vehículos de alta gama para el uso de los consejeros, desvelada en exclusiva por Rioja2, no ha sentado nada bien en las propias filas populares. Aunque de cara al exterior se defiende la necesidad de estos coches, buena parte del partido lo considera un auténtico despropósito.
Si bien entienden el gasto de más de 80.000 euros para renovar el Audi del presidente, un vehículo que habían usado dos presidentes con anterioridad (Ceniceros y Andreu) y que requiere unas características concretas de seguridad e imagen, no encuentran justificación para la compra de otros tres vehículos Mercedes y otros dos Audis que se adjudicarán en las próximas semanas, para el uso de consejeros y altos cargos.
De hecho, llama la atención el discurso del propio portavoz del Gobierno de La Rioja, Alfonso Dominguez, que defiende ahora la compra de tres Mercedes por 72.000 euros cada uno de ellos y sin embargo, en 2020 atacaba duramente al Partido Socialista por comprar un vehículo de 40.000 para la presidencia del Parlamento de La Rioja. “El presidente de esta cámara ha decidido ahora comprarse un coche, no cualquier coche. El adalid riojano de la sostenibilidad quiere un coche de 200 caballos, gasolina, en negro metálico, grafito o similar, muy elegante, con asientos de cuero, cristales tintados, llantas de aleación, faros led y todo tipo de tecnología. Como diríamos en mi pueblo, 'full equip' para el Parlamento de La Rioja”, decía entonces.
Entonces le parecía a Dominguez un despropósito cambiar un vehículo de 21 años de antigüedad gastando 40.000 euros. Sin embargo ahora considera sobradamente justificado gastar medio millón de euros en siete coches que, en todos los casos, tienen menos antigüedad. Setrata, dice ahora, de “adecuar los vehículos a los criterios de sostenibilidad que requieren los nuevos tiempos”.
Lo que no se conoce hasta la fecha es el modelo exacto ni las características de los vehículos comprados. No aparece en ninguno de los documentos de licitación ni tampoco en la adjudicación definitiva. Sí sabemos que inicalmente fueron usados por algunos miembros del Gobierno para acudir a pueblos de La Rioja e incluso al aeropuerto de Logroño-Agoncillo pero que últimamente se ha decidido dejarlos aparcados y utilizarlos exclusivamente para desplazamientos largos a otras ciudades fuera de la comunidad.
En cualquier caso, aunque el discurso público del Partido Popular y del propio Gobierno trate de justificar la compra de estos vehículos de alta gama, la realidad de puertas para adentro es bien distinta. Este capítulo no deja de ser una evidencia más de la distancia entre algunos consejeros, como Daniel Osés, con otros miembros del Gobierno. Y, a la vez, del Gobierno con otra parte del partido que lo sustenta.