La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha presentado una denuncia en la comisaría de Leganitos porque, según ha explicado ella misma, dos jóvenes asaltaron esta pasada madrugada su casa, rompiendo la puerta del portalón de acceso al palacete de la calle Jesús del Valle en el que reside.
Según recoge Europa Press, Aguirre ha asegurado que aunque la Guardia Civil detuvo a los individuos que accedieron en torno a las cuatro de la madrugada en las zonas comunes de su hogar, se les llevó a la comisaría de policía y se les dejó en libertad sin haber sido interrogados.
Aguirre ha señalado que parece ser que este es el “procedimiento normal” si no se aprecia indicios de delito, lo cual ha calificado de inaceptable. Seguidamente ha dicho que si esto le pasa a ella, que “es la presidenta de la Comunidad de Madrid”, “qué será de la indefensión del resto de los ciudadanos”. Por esa razón, ha pedido la dimisión de la delegada de Gobierno en Madrid, Dolores Carrión.
¿Dos 'indignados'?
¿Dos 'indignados'?
Según informa el diario ABC, la presidenta de la Comunidad, en referencia a la identidad de los jóvenes -de unos 20 años de edad- que “allanaron” su domicilio, habría dicho: “Deben de ser dos indignados de los que protege la delegada del Gobierno en Madrid”.
En el atestado del suceso, hecho público por el citado diario, se dice sobre los intrusos lo siguiente: “en el preceptivo cacheo, los agentes
comprueban que los sospechosos llevan sus documentaciones, teléfonos
móviles, entradas para un partido de fútbol y una bufanda del RealMadrid
guardada en una mochila. No encontrando ningún tipo de efecto,
útiles o herramientas que pudieran facilitar el acceso a la vivienda“.