Varios grupos rebeldes iniciaron hoy una ofensiva en el centro de Siria, bautizada como “venganza por Alepo”, en las inmediaciones del pueblo de Al Zara, de mayoría alauí, secta a la que pertenece el presidente sirio, Bachar al Asad, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Desde el amanecer, hay fuertes combates entre los efectivos gubernamentales y organizaciones como el Movimiento Islámico de los Libres de Sham, la Legión de Homs y las Brigadas Ahal al Suna en los alrededores de esa localidad de la provincia central de Hama.
Los insurgentes han iniciado su ofensiva con ataques a varios puestos de control de las autoridades en ese área, que está en la frontera entre Hama y la vecina provincia de Homs.
Por otro lado, continúan los enfrentamientos entre los efectivos del régimen y el Frente al Nusra -filial siria de Al Qaeda- y sus aliados en la población de Jan Tuman, al sur de la ciudad de Alepo.
Aviones de guerra han bombardeado esa zona, así como los pueblos de Kafr Naha y Jan Asal, al oeste de Alepo.
El miércoles por la noche expiró la tregua parcial declarada en la urbe de Alepo el jueves pasado para poner fin a la ola de violencia de las dos semanas anteriores.
El cese de hostilidades redujo los bombardeos y el lanzamiento de cohetes, aunque en los últimos días se han producido ataques aislados dentro de la ciudad.
La pasada madrugada, varios cohetes impactaron en barrios bajo el control del régimen, como Dahie al Asad y Seif al Daula; mientras que aviones bombardearon los alrededores del distrito de Yamiat al Zahrá y Misir, sin ocasionar víctimas.