El uso de las porras centra el interrogatorio a tres agentes de la Guardia Civil que intervinieron en un colegio de Dosrius (Maresme) el 1-O. Andreu Van den Eynde, abogado de Junqueras y Romeva, parece identificar al sargento del operativo que comparece en primer lugar con el agente que en los vídeos de lo sucedido aparece golpeando a votantes con el puño. Lo cuenta Oriol Solé.
El sargento niega golpe alguno y el vídeo no se puede exhibir al testigo sino que se hará en el trámite de la prueba documental por decisión del tribunal. “No se tiró a nadie al suelo, alguien se pudo caer en nuestra presencia”, añade el sargento.
Respecto a los vídeos, el presidente del tribunal, Manuel Marchena, censura que Jordi Pina, letrado de Sànchez, Rull y Turull, interrogue a un agente visionando las grabaciones. Y es que Pina ha intentado corregir al testigo diciendo que en el vídeo no aparecía lo que relataba. “Esto no es serio”, zanja Marchena.
“No vi como mis compañeros golpearon a la gente. Puedo hablar por mí, que sí tuve que usar la defensa para repeler las patadas”, sostiene el segundo guardia civil que también actuó en Dosrius y que declara después del sargento.
“No vi a nadie de la gente avanzarse hacia nosotros. Yo utilicé mi defensa para empujar, pero no vi a nadie utilizarla para golpear”, afirma un tercer guardia civil que intervino en el mismo centro.