Hace casi 80 años que Qué bello es vivir se estrenó en los cines de Estados Unidos. El largometraje dirigido por Frank Capra estuvo nominado a cinco premios Óscar, incluyendo Mejor película, y hoy es considerado todo un clásico del cine estadounidense. Para muchos, se trata de una de las mejores películas ambientadas en Navidad de la historia.
Qué bello es vivir comienza en la Nochebuena de 1945 y cuenta la historia de George Bailey, personaje interpretado por James Stewart, un hombre que está dispuesto a quitarse la vida. Padre de familia y a cargo del negocio familiar en Bedford Falls, George ha renunciado a sus sueños por el bienestar de los demás. Creyendo que su vida ha sido un fracaso y que el mundo estaría mejor sin él, el hombre planea suicidarse.
Cuando está a punto de saltar a las profundidades del río, aparece su ángel de la guarda, Clarence Odbody (Henry Travers). A lo largo de la película, Clarence le enseña a George cómo sería la vida de sus seres queridos y de toda la comunidad de Bedford Falls si él nunca hubiera nacido. Como en la mayoría de películas navideñas, el final es feliz: el protagonista termina comprendiendo el impacto positivo que ha tenido en los demás, regresando a casa con su familia.
Cuando se estrenó, la película no tuvo mucho éxito en taquilla pero, en la década de los 70, esta pasó a ser de dominio público. Desde entonces, se emite cada año en las televisiones de Estados Unidos. Hoy en día Qué bello es vivir es, junto a otras películas más modernas ambientadas en esta época del año como Love Actually, El Grinch o Solo en casa, todo un clásico para ver en Navidad.
Influencias y censura en España
La película dirigida por Frank Capra está basada en el cuento de The Greatest Gift (El mayor regalo), escrito por Philip Van Doren Stern en 1939, que, a su vez, se basa en una de las novelas navideñas más famosas de todos los tiempos: el mítico Cuento de Navidad de Charles Dickens, que se publicó en 1843. Aunque la historia tiene diferencias, la base del relato es la misma.
En Cuento de Navidad, seguimos a un anciano egoísta que se transforma en una persona empática y generosa después de recibir la visita de cuatro fantasmas en la víspera de Navidad que le muestran los errores que ha cometido. Van Doren Stern readaptó esta idea en su cuento El mejor regalo, que fue enviado a Hollywood por su agente, quien pensó que la historia tenía mucho potencial para convertirse en una película.
El largometraje de Capra no se proyectó en España hasta marzo de 1948, más de un año después de su estreno a nivel internacional. La censura franquista afectó a la exhibición de la cinta, y hasta siete minutos del metraje final fueron cortados. El régimen silenció todas las menciones a la cooperativa de vivienda que dirige el personaje protagonista y, muchos años después, la película sin el metraje original se ha seguido emitiendo en nuestra televisión.
En 2021, la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARHM) exigió al Gobierno una investigación para que se repararan y completaran las películas que fueron censuradas durante la dictadura franquista y que, en ocasiones, continúan emitiéndose de forma parcial.