Candidato indígena acusa a Evo Morales de favorecer sólo a los cocaleros

El indígena boliviano Fernando Vargas, que aspira a la Presidencia en los comicios de octubre próximo, acusó hoy al actual mandatario, Evo Morales, de haber favorecido sólo a los productores de hoja de coca y de respaldar actividades ilegales.

En un encuentro con corresponsales de medios internacionales, Vargas aseguró que Morales no es el presidente “de todos los bolivianos”, sino que gobierna sólo para “las seis federaciones del trópico de Cochabamba (centro)”, uno de los principales sindicatos de cocaleros que el mandatario aún dirige.

“De ahí es que ha respaldado el incremento excesivo de la hoja de coca y del narcotráfico, ha respaldado todo lo ilegal, como las cooperativas mineras ilegales, el contrabando”, sostuvo Vargas.

Otros opositores han acusado varias veces a Morales, que gobierna Bolivia desde 2006, de haber sido muy flexible con los productores de hoja de coca, una planta que en Bolivia tiene diversos usos legales pero también se desvía al narcotráfico.

Por contra, el mandatario boliviano se ha defendido al asegurar que durante su gestión se batieron récords de decomisos de cocaína y que hubo una reducción sostenida de las plantaciones ilegales de coca, algo que fue reconocido por Naciones Unidas este año.

Vargas también criticó que el Ejecutivo ostente el “título de Gobierno indígena” y se muestre en el contexto internacional como “defensor de la Madre Tierra, del medio ambiente y de los derechos de los pueblos indígenas”, cuando en el país las autoridades “violan todos esos principios”, según dijo.

Ante ello, indicó que uno de los ejes de la propuesta del Partido Verde es “la recuperación de la democracia y el Estado de derecho”, con el objetivo de que se cumplan las leyes vigentes y los tratados internacionales, algo que, a su juicio, no sucede actualmente.

Vargas cobró relevancia en 2011 y 2012 por encabezar marchas de nativos desde la Amazonía a La Paz para oponerse a un proyecto de Morales de construir una carretera en el Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis), una reserva natural situada en el centro de Bolivia.

Una de las razones por las que los indígenas liderados por Vargas rechazaron aquel proyecto, suspendido por ahora, fue que consideraban que abriría la puerta a la destrucción del parque y a las invasiones de productores de coca de la zona vecina del trópico de Cochabamba, el feudo sindical y político de Evo Morales.

El mandatario y su vicepresidente, Álvaro García Linera, aspiran a la reelección en los comicios del 12 de octubre próximo para un tercer mandato hasta 2020.

Un sondeo publicado por el diario El Deber esta semana otorga a Morales un 54 % de intención de voto, 40 puntos porcentuales por delante de su rival más cercano, el empresario Samuel Doria Medina, que sumó 14 %, mientras que Vargas aparece con un 1 %.

Los otros candidatos a la Presidencia son el expresidente Jorge Quiroga (2001-2002) y el exalcalde de La Paz Juan del Granado.