El PSOE exige el cese de Dijsselbloem y la retirada de apoyo de los socialistas

La gestora del PSOE ha exigido hoy el “cese inmediato” del presidente del Eurogrupo, el socialista holandés Jeroen Dijsselbloem y que el presidente de los socialistas Europeos, Sergei Stanishev “le retire el apoyo político de toda la familia socialdemócrata”.

El PSOE considera que sus declaraciones al rotativo alemán Frankfurter Allgemein Zeitung son “profundamente ofensivas, xenófobas y machistas” y “chocan frontalmente con los valores socialdemócratas”.

Dijsselbloem ha descartado disculparse por dichas declaraciones, en las que acusaba a los países del sur de la Unión Europea (UE) de “gastarse todo el dinero en copas y mujeres”, después de la petición de varios eurodiputados españoles para que se retractara.

El responsable de Unión Europea y Política Internacional de la gestora que dirige el PSOE, Ricardo Cortés, cree que el presidente de los Socialistas Europeos debe “reaccionar de manera inmediata y retirarle el apoyo de toda la familia política socialdemócrata, para que no pueda seguir ejerciendo las funciones de presidente del Eurogrupo”.

Cortés recuerda además, en un comunicado, que no es la primera vez que Dijsselbloem expresa públicamente su “estrecha visión” sobre la solidaridad y la cohesión entre los estados miembros de la UE.

Subraya también que la visión del holandés es contraria “no solo a los intereses de los países del sur de Europa, sino también a los valores y principios como socialdemócratas europeos”.

Dijsselbloem afirmó: “en la crisis del euro, los países del Norte se han mostrado solidarios con los países afectados por la crisis. Como socialdemócrata, atribuyo a la solidaridad una importancia excepcional. Pero el que la solicita, tiene también obligaciones. Yo no puedo gastarme todo el dinero en copas y mujeres y pedirte luego que me ayudes”.

Para el PSOE estas palabras están “llenas de los peores prejuicios que en los últimos años han alimentado los discursos de los partidos xenófobos y euroescépticos en muchos países europeos y han creado una brecha muy preocupante entre norte y sur que actualmente pone en riesgo el propio proyecto europeo”.

En los pasillos del Congreso ha abundado en lo mismo la vicepresidenta segunda y expresidenta del PSOE Micaela Navarro, que ha calificado de “lamentables” las palabras de Dijsselbloem y ha incidido en que, una vez que se ha negado a rectificar y pedir disculpas, “solo tiene una salida y es que dimita”.