Reanudación de los enfrentamientos en la ciudad libia de Sebha

Al menos tres personas han muerto en las últimas horas en la ciudad de Sebha, en el sur de Libia, como consecuencia de la reanudación de los enfrentamientos armados tribales que estallaron por primera vez el pasado día 9.

Una fuente de seguridad indicó a Efe que un militar perdió hoy la vida por la explosión de un proyectil de mortero que impactó en el cuartel militar de la Sexta División del Ejército.

La fuente identificó al fallecido como Mohamed al Mahmudi, que falleció después de ser ingresado en el hospital de Sebha.

Asimismo, indicó que desde anoche varios obuses de mortero han caído en el barrio de Al Mahdia, en el centro de la ciudad, así como en la zona de Al Manshia en el barrio de Al Tahrir.

Por otra parte, el director del hospital de Sebha, Ibrahim al Zawi, informó a Efe de la muerte de otras dos personas como consecuencia de los enfrentamientos entre hombres armados, por una parte, y fuerzas militares regulares y milicianos progubernamentales, por otra parte.

El 9 de enero estallaron unos enfrentamientos en esta ciudad, situada a 750 kilómetros al sur de Trípoli, entre miembros de la tribu Tubi y Uled Soliman que causaron al menos 31 muertos y 65 heridos.

Desde entonces, la ciudad ha vivido bajo una tensa calma mientras las autoridades intentaban mediar en el conflicto.

El Consejo de Ministros libio difundió anoche un comunicado en el que asegura que se tomarán las medidas necesarias para que la calma regrese a Sebha.

Según la nota, se han enviado refuerzos militares a la zona para apoyar a las fuerzas que ya se encuentran sobre el terreno y se ha creado un equipo para investigar las causas de lo ocurrido.

En los combates se está empleando por ambas partes artillería pesada y misiles Grad, según indicaron fuentes castrenses, que precisaron que un grupo de hombres armados se ha atrincherado en las instalaciones de la compañía “Al Hindiya”.

En diciembre de 2012 las autoridades libias declararon el sur del país zona militar de exclusión y decidieron cerrar las fronteras con Sudán, Chad y Níger para combatir el contrabando, la emigración clandestina y, sobre todo, el tráfico de armas.