Urquijo recomienda a los mediadores que busquen territorios en conflicto

El delegado del Gobierno en el País Vasco, Carlos Urquijo, ha recomendado hoy al grupo de mediadores internacionales que intervienen en el proceso del final de ETA que “vayan en busca de territorios en conflicto y ofrezcan allí sus servicios”, porque en Euskadi no se les necesita.

Urquijo, en una entrada en su blog, se refiere a un nuevo pronunciamiento de este grupo de mediadores encaminado a facilitar un gesto de los presos de ETA y que podría darse a conocer la próxima semana en la presentación de las conclusiones del foro social organizado por Lokarri y Bake Bidea el pasado mes de abril.

Este documento, sobre el que todavía está trabajando el grupo en el que se encuentran, entre otros, el ex secretario general de la ONU Kofi Annan y el ex primer ministro de Irlanda Bertie Ahern, pretende ser una guía para que los presos reconozcan el daño causado, según publica hoy el diario El Correo.

El delegado del Gobierno en Euskadi se refiere a las conclusiones del citado foro social, “comparsa de la teoría del conflicto”, dice, para presentar un “banderín de enganche a los presos de ETA para forzar movimientos del Gobierno en política penitenciaria”.

“Mientras esperamos el enésimo documento de este grupo, los presuntos asesinos del inspector de policía Eduardo Puelles no reconocen al tribunal que les juzga, se niegan a declarar y denuncian malos tratos y torturas”, critica.

Urquijo considera que el Gobierno no tiene que cambiar la política penitenciaria, debe defender la construcción de un “relato verdadero” y combatir a quienes desde la ignorancia, la mala fe o las dos cosas a la vez, tratan de imponer una teoría falsa que la sociedad acabe admitiendo por aburrimiento, la teoría del conflicto“.

Urquijo sostiene que el Gobierno “no está ni para falsear la realidad ni para perdonar los pecados de tantos que durante tanto tiempo nos hicieron tanto daño”.

“Se les ha vencido operativamente con tenacidad y con inteligencia y con estas mismas virtudes combatiremos su legado que no es otro que el proyecto político defendido por sus distintas marcas políticas: Bildu, Amaiur y Sortu”, concluye.