Use Lahoz asegura que cuando se gana un premio “la felicidad dura un rato”

El escritor barcelonés Use Lahoz, ganador del último Premio Primavera de Novela con “El año en que me enamoré de todas”, ha asegurado hoy que, cuando se gana un galardón literario como éste, “la felicidad dura un rato, todo es efímero y lo único que cuenta es escribir todos los días”.

“A los escritores nos da la felicidad podernos sentar a escribir cada mañana. La felicidad de este oficio está en el proceso de creación, más que en los premios o en la publicación, que te hacen feliz un rato”, ha señalado en una entrevista con Efe Lahoz, que firma hoy en Málaga ejemplares de su novela, editada por Espasa.

Por ello, considera los premios “una beca para seguir escribiendo”, aunque, cuando un autor se pone a escribir, “no piensa en que ha ganado un premio”.

“Cada novela que hago es la primera. Me siento como un debutante y estoy así de inseguro, aunque mis tres novelas han recibido premios y han ido bien”, ha añadido el escritor, que antes había publicado “Los Baldrich” y “La estación perdida”.

La ganadora del Premio Primavera es “una novela muy urbana, con personajes muy jóvenes que se tienen que buscar la vida en ciudades como Madrid, muy representativa”.

“Madrid es la ciudad a la que va todo el mundo con sus sueños para buscarse la vida y no queda más remedio que establecer relaciones rápidas y generar amistad, y, aunque todo tenga un aura de provisionalidad, se dan relaciones muy intensas”, ha explicado.

Está ambientada “unos años antes de la crisis”, cuando estos jóvenes “todavía podían exiliarse voluntariamente”, porque empezó a escribirla en 2008 “y tampoco se veía venir este drama”.

“Representa a una generación que ha tenido oportunidades y ha viajado mucho, con vivencias en el extranjero. Son un poco víctimas de toda esa felicidad y de tanta flexibilidad, y por eso todavía no se acaban de encontrar a sí mismos ni su lugar en el mundo”.

Después de haber hecho dos novelas “muy duras”, ésta la ha escrito “en tono de comedia”, que le parece “mucho más difícil que un drama”.

“Cuesta más, porque hablar de cosas bonitas como la felicidad y el amor es arriesgado. El amor es casi imposible, y es casi imposible describirlo también”, ha resaltado Lahoz.

Como lector tuvo “novelas iniciáticas” que le “marcaron”, de autores como Pío Baroja, Miguel Delibes, Mark Twain o J.D. Salinger y personajes como Zalacaín o Holden Caulfield, “que permanecen en la memoria y se acaban conociendo mejor que a muchos familiares lejanos con los que apenas se tiene relación”.

De momento, Use Lahoz no está trabajando en su siguiente novela, para la que necesita “tener tiempo por delante sin hacer nada”, aunque sí tiene una idea “muy embrionaria” que le falta desarrollar, y es que considera que “en la literatura, para que salga algo, hay que fracasar muchas veces”.

Por José Luis Picón.