Tejerina informa a las Comunidades del operativo de seguridad para la Cumbre de París y sus objetivos

La ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, ha informado hoy a las Comunidades Autónomas del operativo de seguridad para la Cumbre del Clima de París y de la posición negociadora de la Unión Europea en la cita anual de la ONU.

García Tejerina ha presidido una sectorial extraordinaria de medio ambiente, con la cumbre de París como único punto del día, a la que han acudido seis comunidades autónomas: Asturias, Canarias, Castilla-La Mancha, Cataluña, Galicia y Comunidad Valenciana.

Medio Ambiente ha presentado un informe sobre la situación actual de las negociaciones internacionales y la posición española ante esta reunión.

Previamente, en la inauguración del Congreso Nacional de Periodismo Ambiental, que se celebra en Madrid, García Tejerina ha manifestado su voluntad de luchar por un acuerdo global en la cumbre de París (COP21) “que inicie un proceso irreversible de descarbonización”.

La ministra ha destacado que “en París estaremos todos, pero el resto del planeta estará pendiente de lo que allí suceda”, por lo que esta reunión debe suponer “un salto cualitativo” en la lucha contra el cambio climático.

Tejerina ha comunicado además a las Comunidades Autónomas (CCAA) las medidas de seguridad que rodearán la cita internacional, “aunque estas cumbres están muy habituadas”, ha dicho a la prensa el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, Francisco Martínez Arroyo, quien ha representado también a Extremadura y Andalucía.

La cercanía del lugar donde se desarrollará el evento al aeropuerto, en el extrarradio de la capital francesa, “facilitará” el operativo de seguridad, ha asegurado.

Según el consejero, en esta reunión internacional hay mucho en juego: los objetivos de la Unión Europea son ambiciosos y es la línea a seguir en las negociaciones, aunque evidentemente “haya que dejar algún pelo en la gatera”.

Castilla-La Mancha y otras regiones han pedido que durante la negociación sea tenido en cuenta el sector agroganadero, dado su potencial desde el punto de vista de absorción de los gases de efecto invernadero (efecto sumidero).

En una entrevista con EFE, la directora de la Oficina Española de Cambio Climático (OECC), Valvanera Ulargui, ha subrayado hoy que la Unión Europea “no aceptará un acuerdo” donde “no estén los compromisos de todos los países”.

Y ha explicado que la UE llega a la cumbre con una línea roja para lograr un acuerdo climático global: que el futuro pacto sea lo suficientemente ambicioso para que la temperatura media del planeta no aumente de media dos grados a finales de siglo.

El incremento de dos grados de media en la temperatura del planeta, según el consenso científico, conllevaría impactos irreversibles y muy negativos para la vida en el planeta.

La Organización Meteorológica Mundial (OMM) ha informado hoy de que los datos que ha recogido de enero a octubre indican que este año la temperatura media en la superficie de la Tierra será la más elevada de la que se tiene conocimiento.

Las estimaciones indican que la temperatura media alcanzará el umbral simbólico de un grado centígrado por encima de los niveles preindustriales (1880 a 1899).

Por último, la consejera vasca de Medio Ambiente, Ana Oregi, ha manifestado hoy que las emisiones de gases de efecto invernadero se han reducido en Euskadi un 25 % en los últimos 10 años y esto ha sido posible, sin haber “perdido calidad de vida ni competitividad en las empresas”.

Oregi ha dado a conocer los datos del último “Inventario de Gases de Efecto Invernadero” que elabora anualmente su departamento, en una jornada celebrada en el Palacio Kursaal de San Sebastián, en la que se ha oficializado la incorporación de diez municipios vascos, entre ellos, las tres capitales, en el programa mundial “Compact of Mayors” de lucha contra el cambio climático.

A París acudirán representantes de 195 países con el fin de alcanzar un pacto global de lucha contra el cambio climático.

El objetivo de la COP21 (21 Conferencia de las Partes) es acordar un pacto que gestione el proceso mundial de descarbonización para que la temperatura del planeta no supere los 2 grados a finales de siglo, así como para colaborar en la adaptación a los impactos que producirá el cambio climático aun cuando no se supere ese límite.