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Sobre este blog

En Andalucía, en la última década, se ha producido un incremento sin precedentes en la tasa de creación de empresas, que ha sido apoyado por las iniciativas adoptadas por los distintos poderes públicos y privados. Y detrás de cada empresa creada, hay una historia, esfuerzo, ilusión y mucho sacrificio. Lo que nosotros llamamos ADN emprendedor.

De la amenaza de cierre a llevar el salmorejo hasta Dubai

Línea de producción de la cooperativa / Fotos: Envasados Lola.

Carmen Reina

Una fábrica que da trabajo a la mayor parte de una población cierra y muchas de las familias de la zona se queda sin trabajo y sin otra alternativa que emigrar. Esta es una historia que en estos tiempos de crisis podría ubicarse en cualquier parte del país. Pero es una historia que ocurrió en la barriada cordobesa de Villarrubia hace ya 18 años y donde cinco mujeres buscaron una oportunidad de futuro que bien podría servir de ejemplo para situaciones parecidas en la actualidad.

Lola León y otras cuatro vecinas más de Villarrubia son las socias de la cooperativa cordobesa Envasados Lola, que nació después del cierre de la empresa azucarera que daba trabajo hasta entonces a buena parte de la zona. Ante esa situación, nació la idea de negocio de estas cinco emprendedoras: la elaboración artesanal de platos preparados típicos andaluces. Y hoy, lejos ya de aquella crisis inicial desde la que nacieron, ven pasar la actual exportando sus productos a toda España y a distintos países europeos, Japón, EEUU o Dubai, cuenta la propia Lola León a eldiario.es/andalucia.

Aquí une la cocina tradicional de productos andaluces, la conservación y promoción de la cocina mediterránea, con la falta de tiempo que se suele tener para cocinar en casa. El resultado, platos típicos de Andalucía elaborados de una manera artesanal y listos para llevar a la mesa.

De una idea a un proyecto consolidado

Lo que en un principio nació sólo con la producción del sofrito que sirve de base para muchos platos, ha ido sumando productos a la carta de platos que Envasados Lola prepara: gazpacho o salmorejo, cremas de verduras, productos gourmet como los patés de aceitunas y verduras, platos de verduras ecológicas, diferentes salsas y productos exclusivos como la confitura de oliva.

La situación de desempleo en la que se vieron sus familias fue lo que las llevó a poner en marcha su idea de negocio. Al principio, con las dificultades de ser amas de casa lejos de un perfil empresarial pero con la idea clara de sacar adelante un proyecto para darle un futuro a sus familias. “Los inicios fueron duros. Sin duda lo más difícil fue y es vender; ahora con la crisis estamos en una tesitura complicada. Nuestros productos no son baratos porque son materias primas de primera calidad”. Pero emprendieron esa andadura y obtuvieron su recompensa.

Desde la idea al proyecto consolidado pasaron varios meses. “Varias instituciones nos ayudaron en el proceso y llegamos incluso al Ministerio de Agricultura”, cuenta León. Fue desde allí desde donde las pusieron en contacto con una escuela de conservería y “pudimos establecer las recetas básicas que íbamos a ofrecer”. Luego, cuatro meses de formación puliendo lo que como amas de casa ya habían practicado y estuvieron listas para poner en marcha la cooperativa“.

“Elegimos la calidad para diferenciarnos”

Con la perspectiva del tiempo, Lola León relata cómo los inicios de la cooperativa fueron duros y quizás ahora eso les ayuda capear la crisis actual. “Ahora, gracias a las exportaciones a otros países seguimos manteniendo nuestra producción”, señala. Una producción que no se ha querido separar en todos estos años de “la vía de la calidad que elegimos para diferenciarnos. Nuestros clientes son gente que recuerda y valora el sabor de los productos de verdad”.

En esa misma línea, mantienen viva la innovación en sus platos, ideando nuevas recetas sin utilizar nunca conservantes ni colorantes. La pasteurización de los platos preparados es la clave para darle unos dos años de vida a cada uno de ellos, sin que pierda su auténtico sabor de producto de la tierra.

“Colaboramos con proveedores de productos ecológicos”, explican las socias de Envasados Lola, quienes también colaboran con bodegas en su tarea para la elaboración de nuevos platos. Su objetivo, sumar referencias en su carta, que ya cuenta con más de una treintena de platos preparados, para lograr abrir nuevos mercados.

La apuesta por la iniciativa empresarial propia y el desarrollo económico de una zona que sufrió un grave varapalo con el cierre de la azucarera, es la satisfacción que tienen las cinco socias de esta cooperativa. Algo que les ha sido reconocido también desde organismos e instituciones, logrando galardones del Ministerio de Agricultura y de la Junta de Andalucía que premiaban la apuesta de estas mujeres emprendedoras que siguen al frente de los fogones.

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En Andalucía, en la última década, se ha producido un incremento sin precedentes en la tasa de creación de empresas, que ha sido apoyado por las iniciativas adoptadas por los distintos poderes públicos y privados. Y detrás de cada empresa creada, hay una historia, esfuerzo, ilusión y mucho sacrificio. Lo que nosotros llamamos ADN emprendedor.

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