Alvarado ejecuta los plazos
Durante los últimos años, el CB Gran Canaria se ha preocupado y se ha ocupado en pulir y en proteger a Óscar Alvarado. Desde 2005, cuando destacó en la Minicopa de Zaragoza, la progesión del base se ha cuidado al detalle. Paso a paso, el jugador ha ejecutado los plazos que desde la entidad claretiana se le han ido marcando. Desde su evolución en la cadena de filiales hasta su debut, el pasado martes ante el Estudiantes, en la Liga ACB.
Alvarado, con Marcus Norris en periodo de reposo y con Tomás Bellas metido en problemas de faltas, fue requerido por Pedro Martínez antes del descanso. Jugó poco más de cinco minutos, 315 segundos, en los que anotó un triple, capturó un rebote, perdió un balón, cometió una falta y fue objeto de otra. Pero más allá de las estadísticas, el joven canterano no se achicó en una plaza como el Telefónica Arena y demostró que está para mucho más que una simple solución para cuadrar las cuentas de los cupos nacionales.
Protegido por el club (no hace declaraciones a los medios de comunicación), Alvarado (19 años) es uno más en la dinámica de entrenamientos del primer equipo claretiano. Con contrato profesional desde este verano (de cinco temporadas de duración), es una de las grandes apuestas de futuro de la entidad de la Vega de San José.
El martes, con su debut, siguió la estela de jugadores grancanarios como Juanra Marrero, Emilio Boada, Pepón Artiles, Santi Toledo, Alexis Lombilla, Berni Hernández, Ulises Déniz, Willy Villar, Juanmi Morales, Juanma Rodríguez, Rafa Guerra, Juanqui Paredes, Roberto Guerra, Javi Alvarado (su hermano), Gonzalo Echeverria o Quique Ruiz que han defendido los intereses del Granca en la ACB.