Emery alaba la intensidad del Tenerife
El entrenador guipuzcoano del Valencia CF, Unai Emery, reconoció a la finalización del encuentro ante el Tenerife que su equipo “hoy no ha estado lo bien que hubiésemos deseado”.
Emery achacó el bajo rendimiento de sus jugadores al gran nivel mostrado por su rival que, en todo momento “ha sido principalmente mérito de la presión e intensidad con la que jugó”.
Para el técnico el Tenerife “realizó unos excelentes primeros quince minutos, en los que han salido con una intensidad alto, sabiendo lo mucho que se jugaban”, y reconoció que los blanquiazules realizaron méritos como “para adelantarse en el marcador”.
Eso si, señaló que el encuentro se “equilibró una vez superado este cuarto de hora inicial, lo mismo que la segunda parte, en la que sus jugadores contaron con más disposición de balón, llegando incluso a superar al rival”.
Emery consideró que el marcador final premia así los méritos realizados por unos y otros: “El resultado se puede considerar justo, hemos querido ganar el partido pero nos hemos encontrado con un rival necesitado”, adujo.
El entrenador guipuzcoano destacó también que pese a que su equipo no jugó a un gran nivel, contó con ocasiones claras de gol, por lo que también la victoria pudo haberse decantado de lado levantino.
Emery también lamentó las excesivas concesiones al equipo insular: “Veníamos con la idea de ganar, de ofrecer la misma línea de juego de otros encuentros, pero nos hemos encontrado con un rival que ha querido ganar con lo que también tiene mucho mérito”, añadió.
En este sentido, Emery piensa que el juego del Tenerife no lo refleja la tabla clasificatoria, y considera que “si juega así está más cerca de salvarse que de bajar a Segunda, le veo una línea con personalidad, con ideas claras y competitivo en la Primera división”, aseguró.
El técnico lanzó para el resto de la temporada una misiva de optimismo a los seguidores de su equipo: “Estamos en una situación óptima en la clasificación, con un balance positivo y muy vivo en la Liga”, concluyó.