Dicen los que compartían faena diaria con Cosme Orta que de él se pueden escribir todas las alabanzas que se quieran que ninguna sobraría. Murió este domingo por la noche en un accidente de tráfico y ha dejado conmocionada a la profesión periodística, especialmente a sus compañeros de la Televisión Canaria, donde ejercía de subdirector de Informativos. Imposible superar la definición que de Cosme hace su amigo y compañero Juan García Luján en esta misma edición, por lo que nos limitaremos a sumarnos al dolor de todos los que le conocieron, empezando por sus amigos, su familia y sus compañeros. Su capilla ardiente está instalada en la Cripta de Santo Domingo, de La Orotava, y a las 13.00 horas de este miércoles, desde la iglesia de la Concepción, donde habrá una misa, partirá el cortejo fúnebre rumbo a la incineración de sus restos. Descanse en paz.