Como es imposible que haya una ladera famosa a urbanizar sin que otra se ponga en la misma situación, también en El Varadero nos encontramos con un suelo protegido por el PIOT (Protección Ambiental 1) que el alcalde de El Rosario pretende convertir en urbanizable desde el año 2002. Se trata de una pieza de 200.000 metros cuadrados que viene a ser la única sin tocar que queda en el municipio y que es propiedad de Amador Díaz Ramos, S.L., y también aquí, miren por donde, aparece el empresario Antonio Plasencia, el mismo que pincha y corta en Las Teresitas, en esa ocasión de la mano del alcalde santacrucero Miguel Zerolo. Otra concomitancia: el alcalde de El Rosario también está denunciado en la Fiscalía, y por prevaricación y tráfico de influencias. El Ayuntamiento emitió este sábado un comunicado tratando de aclarar la situación pero mucho nos tememos que sin decir toda la verdad y nada más que la verdad. Entre otras cosas porque meten por medio a una arquitecta que tuvo que salir zumbando ante la imposibilidad de hacer su trabajo con la libertad que mandan los manuales de la deontología profesional.