Pero además del diálogo, a la nueva viceconsejera de Educación, Manuela de Armas, se le reclamará que actúe para corregir algunos comportamientos viciados que han pasado a formar parte de lo habitual en esa consejería. Por ejemplo, las comisiones de servicio injustificadas. El equipo saliente, en un gesto muy poco honroso, dejó autorizadas unas cuantas de ellas que, por sus características, podían haber esperado a que las tramitaran los nuevos responsables. Les ponemos por ejemplo una que suena fatal, la de un administrativo del Museo Élder de la Ciencia y la Tecnología, un maestro que ha conseguido no tocar una pizarra en décadas. Primero logró estar cuatro años liberado para trabajar con María Eugenia Márquez (PP) en el Cabildo de Gran Canaria. Luego otros cuatro con María Rosario Godoy, en el mismo sitio y para el mismo partido. Luego, cuatro años gracias a Rita Martín, en el museo, y ahora otro año más por obra y gracia de CC. Descontamos los años de liberado en el Csif,anteriores a este historial tan consolidado. ¿Alguien le pondrá alguna vez el cascabel al gato?