Pero no sólo se desmelena el Ayuntamiento de Santa Cruz pagando de más por el concierto de Alejandro Fernández. En el mundillo carnavalero todavía la gente no sale de su asombro por lo que costó el escenario principal de las fiestas. Si ya la producción y el montaje suponen una pasta, bueno es decir que hasta ahora los mismos que lo construían incluían en el precio el diseño. Ahora no, ahora que los amigos se dedican también a los decorados televisivos y muy atlánticos, se les contrata a ellos el diseño y se les paga 84.000 euros que hasta el año pasado se ahorraba el erario público.