Salvo que con Ignacio Badenas el Gobierno haga una excepción, han empezado a diluirse las posibilidades de que el comisario Ignacio Badenas, actual jefe del Cuerpo General de la Policía Canaria, vea cumplido su sueño de ser nombrado jefe superior de Policía en Canarias. La tendencia que está implantando el PP en todas las jefaturas es que su titular, que accedería al nivel funcionarial 30, tenga en su poder el título de comisario principal una categoría que se obtiene a partir de años de servicio y la superación de una serie cursos y de pruebas a las que aún no ha accedido el comisario Badenas por no tener acumulada la antigüedad necesaria. Badenas es un profesional muy reconocido por José Manuel Soria y la cúpula canaria del PP. Su prestigio entre los conservadores creció al conocerse sus diferencias con los dos jefes superiores de Policía que tuvo Canarias en la etapa socialista, el comisario principal Narciso Ortega, ahora destinado como jefe superior de Policía en Barcelona, y la comisaria Concepción de Vega, en la actualidad jefa provincial en Cádiz. Al PP llamómucho la atención que Ortega separara a Badenas, por entonces jefe de la Brigada de la Policía Judicial, de las investigaciones por corrupción que afectaban a ese partido. Esas diferencias, que alcanzaron la fase de duros enfrentamientos verbales y acciones judiciales de Badenas por considerarse perjudicado en los nombramientos, le llevaron a separarse temporalmente del cuerpo y aceptar el ofrecimiento de José Miguel Ruano para convertirse en el primer jefe de la Policía Canaria. Badenas ya ha confesado su deseo de abandonar ese destino al comprobar que la coyuntura presupuestaria frustra por completo el prometido despliegue del cuerpo, por lo que es más que probable su regreso a la Supercomisaría. En el caso de no ser jefe superior por esa exigencia del PP, no habría que descartar que ocupe la plaza de número dos regional, el cargo conocido como jefe de UCOT (Unidad de Cooperación Operativa Territorial).