Continúa el socialismo canario metido en su berenjenal, consistente, como saben, en enredarse en sus propias conjuras para dar ventaja al adversario. Ya habrán leído por ahí que hasta el presidente de CC, José Torres, se atreve a pedir la disolución del PSC en la Gomera. Y él, con aquellos pelos y con el nacionalismo derritiéndose al inclemente sol. Pero es verdad que los socialistas tienen mérito: en Fuerteventura, donde ya se echa la camisa por fuera el más pintado, el oficialismo emergente ha colocado de presidente insular de Juventudes Socialistas a un propio, Alejandro Jorge Moreno, un hombre de Domingo Fuentes Curbelo que ha dejado en la cuneta a Ángel Mario Rodríguez, concejal en Tuineje e hijo de Pilar Rodríguez, consejera de la cosa en el Cabildo. Dicen que la doña anda llorando y jurando en arameo por las esquinas. Esta de meter la cuchara en las Juventudes Socialistas es la misma táctica que el aparato ha ejecutado en el congreso regional para cortarle el paso a la senadora Patricia Hernández, identificada con el juanfernandismo. Ellos sabrán.