Los más viejos del lugar seguramente recuerden la más famosa casa que en Agaete hubo jamás. Se encuentra situada en una curva que a su vez es cruce de carreteras ente la que conduce desde Agaete hasta el Puerto de Las Nieves y, a esa altura, se bifurca hacia La Aldea. En Agaete, ya saben, a todo le ponen nombrete, y no se libró la curva del suyo propio, que no transcribimos aquí por irreverente. Era propietario de la casa Ildefonso Ramírez, que fuera polémico secretario particular del presidente Saavedra. Polémico porque fue, que recordemos, el primer secretario particular de la nacionalidad, y no había manual del que guiarse. De ahí que cometiera algunos excesos, como aquel primer Día de Canarias con motoristas de lado a lado de León y Castillo, aquellas flores perennes en todos los salones en la sede de San Bernardo y la famosa vajilla que ya quisiera para sí el Rey Sol. Pues la casa de Ildefonso, la famosa casa de los huevos (por la forma que tienen algunas de sus estancias) ha sido vendida.