Pero hay más pruebas, cada cual más vacua, contra el concurso de radios y contra la presunta participación delictiva del viceconsejero del ramo en el beneficio a concursantes determinados. En la denuncia de El Día ante la Fiscalía se aportan dos absolutamente enigmáticas, propias del KGB: el expediente administrativo y un pen drive en el que aparece en soporte vídeo la conferencia de prensa que Martín Marrero ofreció el mes de agosto de 2011, dos documentos que sin duda habrán de arrojar mucha luz a los fiscales que se pongan a investigar el asunto. Porque, si no estamos desorientados, se trata de dos elementos públicos, un expediente donde supuestamente se reconoce esa llamada de un representante de la empresa de Miguel Concepción, y una comparecencia pública del viceconsejero que, por su propia naturaleza, no oculta nada ni a la acción de la justicia ni al conocimiento de los concursantes y los ciudadanos. Para colmo del despropósito, la representación legal de don Josestaban pide el interrogatorio de los cinco miembros de la mesa de adjudicación, entre los que se encuentra el representante que coló el PP, y el de Miguel Concepción. Pero, suponemos que por error, se olvida del interrogatorio clave, el del viceconsejero acusado de tan gruesos delitos. Va a haber mucho ruido, y mucho nos tememos que nada judicializable, salvo que el denunciante guarde para sí algo que no ha puesto en la denuncia y que a todos desde luego se nos escapa.