Pero además de lo llamativo de esta propuesta, el documento de modificación de la RPT del Servicio Canario de la Salud contiene una auténtica dedicatoria de puesto directivo al que sólo falta ponerle el nombre y los dos apellidos. En esa propuesta de modificación se sugiere la refundición en un único servicio de los de Contratación, Gestión Económica y Unidad de Apoyo. Ese nuevo servicio, a cuyo frente se colocaría un jefe o jefa, se llamaría Unidad de Apoyo y Contratación, y se convertiría en el más poderoso del SCS por las competencias que acumularía. Ustedes concluirán rápidamente que, en realidad, se trata de reducir puestos directivos y, a la postre, costes salariales. Pues se equivocan, porque en la misma propuesta se contempla la creación de dos puestos singularizados (algo hasta ahora reservado solamente a los directores generales y no a los jefes -o jefas- de servicio) por lo que seguirían existiendo tres plazas 28-75 con las mismas retribuciones que las que supuestamente se suprimirían o fusionarían. Ya podemos ir haciendo el retrato robot de las destinatarias de dos de estos tres puestos (el de jefa y el de uno de los dos puestos singularizados). Pero vamos a dejar que la sabiduría que impera en la función pública se encargue de identificar a las afortunadas.