Pero si bien no es noticia que Soria actúe penalmente contra nosotros, sí es novedoso que su portavoz más autorizado, Larry Álvarez, lo anuncie. En los mentideros políticos se interpretaban esas llamadas telefónicas a la oposición -también absolutamente inéditas- como un gesto de inquietud de los dirigentes del Partido Popular, que se han visto sorprendidos por la contundencia de los datos que hemos empleado para demostrar que Soria recibió una dádiva del empresario que iba a salir más beneficiado del concurso eólico que él dirigía políticamente en los años 2004 y 2005. La militancia del PP empieza a mosquearse y a pensar que los de CANARIAS AHORA no deben andar tan desencaminados cuando van desmontando el mito de un líder que creían absolutamente invulnerable y de una conducta ética intachable. Nada decimos de la comisión de posibles delitos porque no nos corresponde, pero hasta es muy posible que esté redactándose alguna denuncia que complemente la de la trama eólica de un modo bastante sustancioso. Vamos, como para ir a pescar tiburones.