Desgraciadamente para la libertad de expresión y para el derecho de los españoles a una información libre, plural y de calidad, no ha sido esta la primera vez ni será la última en que el PP veta a periódicos o periodistas. No les vamos a aburrir con la historia que ya conocen de CANARIAS AHORA con el PP canario y con ese dechado de democracia que se llama José Manuel Soria. Dolores de Cospedal, que es la protagonista de la efeméride toledana, ya le puso una cruz y una raya a la periodista Ana Pastor, directora y presentadora de Los Desayunos de TVE, y algunos dirigentes del PP ya han deslizado en las redes sociales que la removerán de ese puesto al minuto siguiente de que Rajoy llegue a La Moncloa. Y todo por haberse atrevido a hacer preguntas comprometedoras a lideresas como la propia Cospedal o Esperanza Aguirre. En Aragón, María Fernanda Rudi vetó a El Periódico en la campaña electoral, y alguna que otra periodista de Telecinco también ha sufrido las inclemencias antidemocráticas de ese partido. Hasta la Cadena Ser sufrió una vez el desplante de ese partido. En privado algunos dirigentes de la cosa se solidarizan con los periodistas y con los medios agredidos, pero a la hora de la verdad se desparraman encima si se les pide que planten cara a esos atropellos.