Con estos sofocones para despedir julio se nos pasó comentar, en tiempo y forma -y sin micrófonos-, la destitución de José María Cabrera como gerente del Instituto Insular de Deportes de Gran Canaria. La Junta Rectora decidió el 31 de julio dar carpetazo a una etapa polémica con más escándalos en primera plana que por su gestión, desde que el PP decidiera arramblar con el anterior equipo directivo de Angulo-CC. El IID terminará en septiembre de deshojar la margarita sobre el sustituto del que fuera protegido del ex vicepresidente primero, Miguel Jorge Blanco. Incluso en los tiempos más críticos entre el ex gerente y el ex consejero, José Miguel Álamo, a cuenta de quién y cómo manejaba la crisis por la muerte en la piscina del Martín Freire. El hombre mejor colocado para la gerencia es el economista de la casa José Alberto Guedes. Suenan otros cuatro o cinco gerenciables. De dentro y de fuera del Instituto. Y alguno de ellos, despedido en 2004 por el Cabildo de Soria (provincia de Las Palmas), pendiente del recurso de sus despidos improcedentes ante la Audiencia Provincial.