El macho Soria (gracias, Pepe Alemán por existir ) tampoco eligió el sábado arropar a sus alcaldes absolutos de Agaete, Valleseco, Tejeda (a esta fue Larry), o los pactistas de Santa Brígida (ole) o Arucas (y ole que ole y olé). Se fue a Mogán, a escuchar a Paquirrín emocionarse por los “malos momentos” vividos. A escuchar los abucheos y silbidos a la oposición por parte del público traído en guagua por el Ayuntamiento a la plaza de Mogán. Y a echar la manita por la espalda a un alcalde que repitió eso de “una gestión clara y honesta del Ayuntamiento y de los recursos del municipio”. Palabra de Paquirrín dicha el sábado, sólo 24 horas después de que presentara un informe de uno de sus técnicos imputados en Góndola, el arquitecto Francisco Román, con el que logró que el juicio por la querella por prevaricación y contra la ordenación del territorio presentada por la Heredad de Aguas de Piñones se aplazara hasta octubre. Veranito tranquilo para Paquirrín. Queda pendiente, eso sí, la remisión de la parte gorda del caso Europa al juzgado de sus desgracias: Góndola. Pero siempre es gratificante que te respalden tus jefes de centuria.