Más de 65.000 personas conocen la figura de Benito Pérez Galdós en la exposición que acoge la Biblioteca Nacional
Más de 65.000 personas han conocido la figura del escritor canario Benito Pérez Galdós en la exposición que acoge la Biblioteca Nacional de España, en Madrid, y que permanecerá abierta al público hasta el 16 de febrero.
La muestra, bajo el título Benito Pérez Galdós. La verdad humana, está organizada junto a Acción Cultural Española (AC/E) y el área de Cultura del Gobierno de Canarias con motivo del centenario del fallecimiento del escritor en el año 2020.
Esta exposición, informa el Gobierno canario en nota de prensa, ha sido concebida para “dar cuenta del mundo en transformación que fue forjando la polifacética” personalidad del escritor canario y cómo sus obras y aportaciones públicas inciden “en una nueva manera de entender la realidad moderna”.
La exposición está comisariada por Germán Gullón y Marta Sanz, y la componen más de 200 obras entre manuscritos, libros impresos, esculturas, grabados y lienzos de las colecciones de la BNE y de otras entidades españolas y coleccionistas privados.
De esta forma, tras su paso por Madrid, la muestra se podrá visitar en Canarias, en concreto, entre el 29 de abril y el 30 de agosto en la sala Fortunata y Jacinta de la Casa Museo Benito Pérez Galdós de Las Palmas de Gran Canaria, mientras que del 12 de septiembre al 8 de noviembre estará en el Instituto Canarias Cabrera Pinto de Tenerife.
La principal aportación de Benito Pérez Galdós (Las Palmas, 1843-Madrid, 1920) a la cultura española, apuntan, fue inventar una imagen moderna del ser humano, que superaba la forjada a base de los arquetipos mentales y dualidades predominantes desde el Renacimiento: razón y corazón, mente y emociones, espíritu y cuerpo.
Estos contrastes habían determinado los vaivenes de un campo intelectual colonizado por esa ideología que hizo prevalecer la superioridad del espíritu (lo noble) sobre el cuerpo (lo innoble) y contribuyó al desequilibrio, personal y colectivo, de la sociedad española.
Así, Pérez Galdós ofreció en sus obras literarias un modelo de ser humano real, verdadero, en sintonía con su contemporaneidad, que no renunció a la herencia literaria del siglo de Oro y muy especialmente a la del universal personaje cervantino, don Quijote de la Mancha, cuyo poder de imaginación podía doblegar las preocupaciones materiales. Sus quijotes decimonónicos ya no serán hidalgos, sino abogados, empleados, médicos, comerciantes, profesores, maestros, y mujeres admirables. Todo ello se va mostrando en la exposición.
Por último, la muestra expone al final de la misma las entrevistas, filmadas por la cineasta Arantxa Aguirre, a Almudena Grandes, Elvira Lindo, Manuel Longares, Antonio Muñoz Molina, Care Santos y Andrés Trapiello, que reflexionan sobre el impacto de la obra de Galdós en su propio quehacer literario, así como sobre los textos galdosianos que más enriquecieron su experiencia lectora: los Episodios Nacionales, Fortunata y Jacinta, Tormento, Tristana, Misericordia y El amigo manso.
0