La Fecam negocia con el Gobierno regional para mantener la ayuda social
La Federación Canaria de Municipios (Fecam) ha comenzado a negociar con el Gobierno regional para recuperar las partidas destinadas a la financiación de la ayuda social que gestionan los ayuntamientos. El alcalde de la localidad majorera de Puerto del Rosario y miembro del comité ejecutivo de la Fecam, Marcial Morales, ha reivindicado la necesidad de mantener este capítulo para evitar la extinción de servicios como las escuelas infantiles. “Estamos convencidos de que antes o después vamos a poder pensar una solución que permita que esas partidas no se bloqueen”, ha dicho en el programa El Correíllo, de CANARIAS AHORA RADIO.
“Entendemos que lo que se plantea es de razón, porque lo que estamos es defendiendo a las economías más débiles en una situación de crisis tan dura”, ha esgrimido Morales. Para que las escuelas infantiles municipales puedan seguir funcionando, el primer edil pide al Gobierno un desembolso de algo más de cinco millones de euros que han desaparecido de los presupuestos para 2012. “Estas partidas en el presupuesto del 2010 estaban incorporadas, en el 2011 ya no se recibieron”, ha asegurado. “Eran unas cantidades que se venían recibiendo de manera regular”.
Pese a la urgencia que pide la Fecam, lo único que ha manifestado el Gobierno regional hasta ahora es, en palabras del consejero de Economía, Javier González Ortiz, el “poco margen de maniobra” con que cuenta para encontrar rtecursos que permitan mantener las guarderías y otras ayudas relacionadas con la emergencia social. “Entendemos las dificultades”, ha dicho Morales, “todas las administraciones estamos 'a dos velas', pero de los que estamos hablando es los imprescindible para muchas familias”.
El principal escollo remite, de nuevo, a la madeja competencial. “Si hablamos de escuelas infantiles estamos hablando de una clara competencia del Gobierno de Canarias que están ejerciendo en su lugar los ayuntamientos”, ha puntualizado, “pero una cosa es gestionarla y además pagar una parte alta de lo que cuesta, y otra cosa es que el gobierno se desentendiera de esa actuación”. Y concluye: “Para muchos de los 45 ayuntamientos, aproximadamente, que tienen escuelas infantiles en este momento es completamente imposible seguir prestando ese servicio”.