La jarana carnavalera deja la ciudad hecha un chiquero
Después del descomunal jolgorio, las principales vías del centro urbano de Santa Cruz de La Palma, situadas entre el puerto y La Alameda, pero especialmente la calle Real, plaza de España y avenida Marítima, ha sido tomada por el dispositivo de operarios que realiza desde la cinco de la madrugada de este martes el gran zafarrancho de limpieza organizado por el Ayuntamiento de la capital. El desenfreno de la batalla de polvos de talco llevada a cabo tras el multitudinario desembarco de Los Indianos, ha dejado la ciudad hecha uno chiquero.
El concejal de Servicios Públicos e Infraestructuras, Manuel Abrante, encargado de coordinar el citado despliegue, ha informado en la mañana de este martes que en el zafarrancho participan 60 empleados del Consistorio, así como cuatro camiones-cubas de agua, cuatro máquinas barredoras, tres camiones recolectores y dos palas mecánicas.
Ha indicado que la ingente labor de limpieza la han iniciado a las cinco de la madrugada y la previsión es que, este año, se termine sobre las 14.00 horas pues, ha precisado, la tarea “va más rápida que en 2012”. Ha calculado que se recogerán entre 40 y 50 toneladas de basura, cantidad, dijo, similar a la del año pasado. Ha comentado que, pese a que el número de asistentes a la fiesta ha sido menor, se ha producido “un incremento del botellón” y hay esparcido por la ciudad un mayor volumen de envases de cristal y plástico.
El servicio de limpieza ha sido reforzado con maquinaria cedida por los ayuntamientos de Breña Baja, El Paso, Los Llanos de Aridane, el Cabildo de La Palma y la Asociación de Bomberos Voluntarios.
