El Govern no prevé que su giro independentista retrase el Fondo de liquidez
BARCELONA, 14 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de Artur Mas rechaza que su “cambio de rasante” de los últimos días, con un discurso abiertamente rupturista con el resto de España, implique retrasar la puesta en marcha del Fondo de liquidez a las comunidades autónomas que han solicitado.
El portavoz del Ejecutivo autonómico, Francesc Homs, ha confiado en rueda de prensa en que no haya ninguna “represalia” ante sus posicionamientos independentistas, y si las hubiese, el Gobierno central y la clase política española cometería un error histórico.
Lo ha dicho después de la reunión de este viernes del presidente de la Generalitat, Artur Mas, con la Asamblea Nacional Catalana (ANC), la entidad que organizó en esta Diada la manifestación a favor de la ruptura con el resto de España en la que participaron más de 1,5 millones de personas, según la policía catalana.
“Ni se me pasa por la cabeza” la hipótesis de que pueda haber represalias, ha asegurado Homs, que ha indicado que el Gobierno catalán trabaja con el calendario de que a finales de septiembre el fondo esté operativo.
La reunión entre Mas y los independentistas ha durado más de una hora, y en ella, el presidente les ha emplazado a mantener la ilusión que ha generado el éxito de la manifestación rupturista.
“ERRORES”
Para Homs, la reacción que han tenido el Gobierno, el PP y el PSOE tras la manifestación es del todo errónea, y les ha pedido un cambio de actitud.
“La sensación que tenemos es que hay un Gobierno y una clase política, la española, que se empeña en no querer ni escuchar ni analizar lo que pasa”, ha indicado Homs, criticando así la ausencia de líderes del PP y PSOE en la conferencia de Mas en Madrid y que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, aún no se haya posicionado sobre la manifestación.
Para el portavoz, este silencio sólo indica que desde Madrid, hay muchas probabilidades “de que tiene todos los números para equivocarse en las decisiones que debe tener”, y esta reacción de indiferencia y menosprecio causa honda preocupación en el Gobierno de Artur Mas.
Según Homs, con este comportamiento, será “responsabilidad” de la clase política española las consecuencias que tenga su actitud.
INCÓGNITAS
El Gobierno autonómico por ahora no da detalles sobre los pasos que debe seguir la independencia de Cataluña: sí ve necesario ganar un referéndum y una amplia mayoría social, pero aún no ha concretado qué porcentaje de votos a favor de la ruptura serían necesarios --según la ANC, bastaría con un 50 por ciento de los sufragios más uno--.
A la espera de que todo ello se vaya concretando, el Gobierno de la Generalitat sí ha pedido a la ANC que siga trabajando para “ensanchar la mayoría” a favor de la independencia como se visualizó este martes.
Homs ha certificado que el Gobierno ha consumado un “cambio de rasante”, aunque ha indicado que tampoco debería extrañar a nadie, puesto que CiU ya anticipaba la denominada 'transición nacional' catalana en su programa electoral de las autonómicas de 2010.
Ha evitado posicionarse sobre si hay malestar en UDC ante la reacción que está teniendo el Ejecutivo de Artur Mas, y ha recalcado que en cualquier caso, Unió y CDC serán capaces de alcanzar un acuerdo sobre el futuro de Cataluña en el programa de CiU para las elecciones catalanas.