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La Graciosa: ¿qué supone convertirse oficialmente en la octava isla canaria?

La Isla de La Graciosa desde el Mirador del Río, en el norte de Lanzarote.

Jennifer Jiménez

Las Palmas de Gran Canaria —

¿Tendrá un cabildo? ¿Y derecho a un diputado en el Parlamento de Canarias? ¿Cómo se administrará? Son algunas de las preguntas que rondan a la ciudadanía estos días en los que tanto se habla de La Graciosa, después de que el debate sobre su independencia llegara al Senado. La isla de las calles de arena ha estado en el punto de mira en las últimas semanas, sin embargo, la declaración de intenciones de la Cámara Alta se quedará de momento en solo eso, o al menos hasta que se avance en el Estatuto de Autonomía de Canarias, cuya reforma ya se está tramitando en el Congreso de los Diputados. Será este documento el que fije este reconocimiento y, a partir de ahí, se podrá debatir en qué términos quedará administada.

El reconocimiento de las singularidades de La Graciosa es una lucha histórica de sus vecinos (casi 750), que llegaron a conformar una plataforma para impulsar esta iniciativa y que incluso ha sido galardonada con la Medalla de Oro de Canarias por su constancia. El Parlamento regional aprobó en la anterior legislatura, en 2014, una Proposición No de Ley (PNL) en consonancia con esta reclamación y que marcaba el camino para lograr este propósito.

La concejala delegada de La Graciosa, Alicia Páez, señala que la isla no está pidiendo un cabildo o un ayuntamiento; lo que solicita es su reconocimiento como lugar habitado para dar respuestas a la realidad que vive actualmente la Isla y especialmente para la defensa y gestión de sus recursos naturales.

Cómo quedará administrada tras la reforma del estatuto será un debate que vendrá posteriormente. “Eso será otra lucha”, subraya la concejala del Ayuntamiento de Teguise, que además recuerda que será de acuerdo a la vigente Ley de Municipios de Canarias. Los grupos parlamentarios, en general, coinciden en que están dispuestos a dialogar sobre cuál será la forma de gestión administrativa de La Graciosa, aunque de momento lo prioritario es que se apruebe el nuevo Estatuto de Autonomía.

La PNL de 2014 sí que instaba al Gobierno de Canarias a que colaborara “con el Cabildo de Lanzarote y con el Ayuntamiento de Teguise para la conformación de una pedanía en la isla de La Graciosa, entidad local menor sin personalidad jurídica, adscrita al municipio de Teguise”.

Ese acuerdo parlamentario también solicitaba que se promoviera el Consejo de la Ciudadanía de La Graciosa como una herramienta estable de participación, el impulso de la planificación de los recursos naturales para hacer compatible la vida de la población con la conservación de su naturaleza. A su vez, se insta al Estado a que colabore con el Ejecutivo regional en garantizar a los ciudadanos de esta isla contar con elementos indispensables como un helipuerto, cementerio, gestión de residuos…

Del Senado al Congreso, cuatro años después

Del Senado al Congreso, cuatro años después El senador del PP Joel Delgado llevó esta iniciativa a la Cámara Alta el pasado mes de junio. “Lo que hemos hecho es básicamente copiar en cierta manera y mejorar un poco el texto que se llevó al Parlamento de Canarias y que fue el que impulsó este reconocimiento legal”. No obstante, es consciente de que ahora hay que estar muy pendientes de la tramitación del Estatuto de Autonomía.

A su juicio, a partir de esa consideración de isla habitada habrá unas consecuencias jurídicas que se pueden desarrollar y que permiten optar a una entidad local menor con presupuesto y capacidad administrativa propia, pero “siempre sin perjuicio de su adscripción administrativa a Teguise”. Ese ayuntamiento será pues el que “tutele” en cierta manera a La Graciosa.

Señala que esta nueva entidad local no tendría por qué tener una consecuencia económica, pero de tener algún coste estaría perfectamente justificada por la presión que ya tiene la isla en el ámbito turístico.

Otras formaciones como Nueva Canarias recuerdan que el Senado lo que ha hecho es “una declaración de intenciones”, que siempre es positivo, pero el compromiso y las consecuencias son las del Estatuto. En la misma sintonía se muestra Alicia Páez: “Es de agradecer que el Senado haya hecho ese reconocimiento pero ahora hay que estar pendientes del Congreso de los Diputados”.

El diario de sesiones del Congreso del pasado 25 de julio volvía a recoger los avances sobre el Estatuto de Autonomía y concretamente esta cuestión. Los diputados hicieron referencia a ese debate del Senado y se subrayó varias veces que la isla de La Graciosa sí que quedará reconocida en el nuevo Estatuto como octava isla. Un documento gracias al que esta iniciativa será una realidad.

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