Antonio Castro es reelegido por práctica unanimidad
El nacionalista Antonio Castro ha sido reelegido presidente del Parlamento regional, cargo que ostentó en la pasada VII Legislatura, por prácticamente la unanimidad de los grupos parlamentarios, ya que contó con el apoyo de 58 diputados y dos votos en blanco.
A Castro le valía el respaldo de los 36 diputados del pacto entre el PSC y CC para resultar elegido, pero se han sumado los 21 escaños del PP y los tres de NC. El propio presidente del Parlamento aseguró posteriormente que él fue uno de los diputados que votaron en blanco. El otro pudo ser el representante de la Asociación Herreña Independiente (AHI), José Javier Morales Febles.
Castro es el tercer presidente de la Cámara que repite cargo, pues antes que él fueron reelegidos el nacionalista Victoriano Ríos (II y III Legislaturas) y el actual presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna (IV y V Legislaturas).
La elección del vicepresidente primero de la Cámara, el socialista Julio Cruz, por 35 votos, supone que un diputado de CC o del PSC no ha seguido la directriz del Pacto PSC-CC, pues el segundo vicepresidente, el conservador Manuel Fernández, si tuvo los 21 votos de sus compañeros de grupo parlamentario.
La Mesa del Parlamento se completa con el nacionalista José Miguel González (35 votos) como secretario primero y la conservadora Águeda Montelongo (21 votos) como secretarios primero y segundo.
Dado el sistema de elección simultánea de los miembros de la Mesa que no son el presidente, era imposible que Nueva Canarias, con tan solo 3 diputados, pudiera conseguir representación en el órgano de dirección del Parlamento sin haberlo pactado antes con alguno de los grupos parlamentarios con más número de escaños, en este caso el PP y CC.
“Ni milagros ni trucos de magia”
Antonio Castro, ha asegurado que en la VIII Legislatura “nadie nos pide milagros, ni trucos de magia” para afrontar “una legislatura difícil y esperanzada”.
“Todos nos demandan dedicación, voluntad de diálogo, imaginación, esfuerzo y patriotismo, virtudes que no tienen colores ni son privativas de una fuerza política social”, aseguró tras haber sido elegido el presidente con mayor respaldo de la Cámara en la historia de la autonomía.
Precisamente, Castro pidió perdón a su grupo parlamentario porque “uno de los votos en blanco fue el mío”, toda vez que “así simbolizo que quiero ser el presidente de todos” los diputados, con independencia del partido al que representen.
El reelegido presidente de la Cámara pidió a los 60 diputados “unidad, tesón y ética” para afrontar el “horizonte de dificultad y trabajo” que se abre en Canarias en los próximos cuatro años.
“Con esos valores podremos cumplir el sagrado mandato popular, porque en la promesa o juramento de este día, contamos con un juez y un testigo inapelable, el pueblo, al que debemos la dignidad que ostentamos y que nos exige, sin excepciones o matices puntuales, altura de miras y amor a nuestra tierra”, afirmó.
Durante su primera intervención como presidente del Parlamento de la VIII Legislatura, Castro recordó su intención de no repetir en el cargo, una cuestión que reiteró al final de los pasados cuatro años, pero también dijo que “desde que estoy en política he demostrado también mi disponibilidad para estar allí donde las necesidades, las responsabilidades y todos y todas ustedes determinen”.
Progreso, justicia social, unidad y solidaridad
Con esa disposición, afirmó asumir la Presidencia “con la firme convicción de que el progreso y la justicia social, la unidad de las islas y la solidaridad entre todas son las primeras preocupaciones de todas sus señorías”.
Asimismo, recordó a los 60 diputados que, pese a haber sido elegidos en distintas circunscripciones insulares y pertenecer a varias opciones políticas, “todos nosotros conformamos la máxima representación del pueblo canario”.
“Es hora de asumir los retos que demandan los ciudadanos y dar respuesta a sus aspiraciones y estar muy cerca de quienes más necesitan de nuestro trabajo, en todos los lugares de todas nuestras islas pese a concurrir por circunscripciones específicas a través de diferentes organizaciones políticas”, arengó a los 60 diputados.