Zonzamas lucha por dejar atrás su leyenda negra

Cuarenta y cuatro personas se reparten entre la Planta de Clasificación, la de Biometanización, la Nave de Residuos Peligrosos, el Crematorio de Animales, aún por ponerse en marcha, y el Aula Ambiental, la cara más amable de un lugar que quiere enterrar de una vez por todas su leyenda negra.

En diciembre de 2008 el Cabildo de Lanzarote, presidido entonces por Manuela Armas (PSOE), tomó la histórica decisión de secuestrar el servicio que la Unión Temporal de Empresas formada por Canarias de Limpieza Urbana, S.A. (Clusa), Daorje, S.A .y Danigal S.A. venía prestando en el Complejo Ambiental de Zonzamas. Menos de dos años después, en octubre de 2010 y ya con Pedro San Ginés (CC) en la presidencia, se decidía no devolver la concesión a la UTE. Visto desde la distancia se puede decir que aquella fue una decisión tan arriesgada como efectiva.

En efecto, Zonzamas era permanente noticia por los conflictos laborales del personal de las empresas concesionarias, de la guerra empresarial entre éstas, de los continuos incendios que allí se producían y de, cómo no, la sombra de la sospecha de la corrupción político empresarial. La opinión pública, además, vivía en un permanente estado de sobresalto como consecuencia de los continuos malos olores que afectaban fundamentalmente a los vecinos de Argana Alta, pero que también podían ser percibidos incluso en Playa Honda.

Afortunadamente esta vez el cuento ha cambiado para mejor. Pese a todo, en la mañana del martes 19 de febrero, cuando acudimos a Zonzamas y realizamos el recorrido en compañía del Director del Complejo, Roberto Sánchez Guerra, y el asesor político del área, Domingo Cejas, un incendio de pequeñas dimensiones nos sorprende y alerta a los operarios que se afanan en mantener el lugar bajo control.

“Es importante que se transmita la realidad de que se recicla todo lo que aquí entra”, es uno de los primeros mensajes que recibimos de Sánchez Guerra y de Cejas. Zonzamas sigue luchando contra la creencia popular de que es inútil separar en origen porque luego todo se entierra sin miramientos. De ahí que el Complejo sea ahora un lugar abierto a la ciudadanía. Se han celebrado ya distintas jornadas de puertas abiertas y su Aula Ambiental recibe un sin parar de escolares de todos los centros de la isla. Ahí se les trata de inculcar la cultura del reciclaje de un modo teórico y, sobretodo, práctico y entretenido.

Al Complejo Ambiental de Zonzamas entran todos los días del orden de las cien toneladas de residuos. Se calcula que cada uno se nosotros genera, por día, kilo y medio de lo que vulgarmente conocemos como 'basura'. Ahí se incluyen el plástico y los envases, el vidrio, el papel y cartón y los residuos orgánicos. A esto hay que añadir más de cien toneladas a la semana de restos de poda y voluminosos y varias más entre RAEE (Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos) y los considerados peligrosos (restos procedentes de hospitales, ambulatorios, etc?)

A día de hoy el Cabildo tiene prácticamente todo externalizado. Empresas como Recuperadora Canaria, la UTE Lanzarote Selectiva, Ecovidrio, Ecoembes o Cathisa Medioambiente, gestionan los distintos tipos de residuos que llegan en un continuo ir y venir de camiones de todos los tamaños. “Nos faltaría sacar a concurso la planta de clasificación y la de biometanización”, subraya Domingo Cejas. La idea de la primera corporación de la isla es que sea la empresa privada quien, llegado el caso y mediante el preceptivo concurso, sustituya la maquinaria de clasificación, un tanto obsoleta, y así se lograría una importante puesta al día.

Esa sería una de las actuaciones prioritarias en Zonzamas, junto con la puesta en marcha del Crematorio de Animales, cuya empresa gestora aguarda por el permiso definitivo del Gobierno de Canarias. La otra, para la que hay presupuesto consignado de un millón y medio de euros, consistiría en la construcción de dos grandes celdas donde enterrar lo que no se recicla. Cada una de ellas sería capaz de alargar la vida del Complejo en unos diez o doce años. “Si las cosas se siguen haciendo como hasta ahora”, concluye Roberto Sánchez Guerra, “esto nos puede durar otros veinticinco años”.

En Noviembre de 2007 Joaquín Ordieres, asesor técnico de la UTE que gestionaba el Complejo, le daba ocho años de vida. De haber seguido por el mismo camino, por tanto, hoy estaría a punto de morir.

Los neumáticos y el biogás

El Complejo Ambiental de Zonzamas todavía acumula unas 800 toneladas de neumáticos “que saldrán tan pronto como podamos, este mismo año” , dice Domingo Cejas, asesor político de Residuos. De hecho ya están haciendo acopio de presupuesto de navieras para sacarlos de la isla. Contrasta esta imagen con la gestión de la planta de Biometanización. Su encargado, un joven técnico llamado Matías Morales, habla con pasión de las posibilidades del biogás “con una riqueza en metano sobre el 77-78%”. Desde hace casi un mes dos granjas llevan el purine que, unido a los lodos de la depuradora y al que emana, y se canaliza, del subsuelo, ha generado desde junio de 2012 nada menos que 520 Megavatios. La planta es capaz de generar energía para mantener el Complejo y vender la sobrante. De momento no puede por cuestiones burocráticas, “eso sería cerrar el círculo casi perfecto”, apunta Roberto Sánchez, el Director de Zonzamas.

La realidad de La Graciosa

La gestión de los residuos de la isla de La Graciosa ha sido objeto de debate profundo de unos años a esta parte hasta que, por fin, se dio con la tecla adecuada. El gran problema que representaba acumular residuos en un territorio tan limitado y medioambientalmente frágil, se ha solventado. Desde hace unos meses viene funcionando una Planta de Transferencia que se encarga de compactar los residuos sólidos urbanos, por una parte, y el papel y cartón, por otra. Es el propio Complejo Ambiental de Zonzamas quien lo gestiona. Cada semana o diez días llega a sus instalaciones un volumen aproximado de Residuos Sólidos Urbanos que, en conjunto, suman unas 26 toneladas al mes , lo que supone una cantidad por persona y día ligeramente superior a la media de Lanzarote. Los gestores de vidrio y plástico y envases, por su parte, proceden también a la retirada de los residuos separados. En todos los casos, tanto en verano como en Semana Santa, se rompen todas las previsiones.

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