La banda 'Dominican Don't Play' queda casi desarticulada tras detener a 40 integrantes
MADRID, 5 (EUROPA PRESS TELEVISIÓN)
La Operación Manguera, llevada a cabo por la Policía y la Guardia Civil en la Comunidad de Madrid se ha saldado con la detención de “40 personas miembros de la banda latina 'Dominican don't play'”, lo que ha permitido que el grupo haya quedado “prácticamente desarticulado”, en lo que ha sido “el golpe definitivo contra la banda”, según aseguró la delegada del Gobierno en Madrid, Amparo Valcarce.
Valcarce explicó que se han practicado unos “20 registros domiciliarios” y calificó de “muy importante” la actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, ya que las 40 personas detenidas “tienen imputaciones muy graves tanto por asociación ilícita como por delitos relacionados con el robo y el tráfico de estupefacientes.
Asimismo, señaló que, entre los detenidos, hay “33 varones y 7 mujeres”. Un dato que destacó la delegada, porque a su juicio, “aunque hay mayor presencia masculina”, no hay que olvidar que hay también “muchas mujeres jóvenes que se integran en estas sectas”. Valcarce insistió también en que, a pesar del nombre de la banda, no sólo puede relacionarse con una nacionalidad, ya que “hay 19 españoles integrados” y el resto son “miembros de cinco nacionalidades diferentes”
De los 40 detenidos, 6 son menores de edad, por lo que Valcarce, alertó de la importancia de “preservar” a niños y jóvenes, ya que “estos grupos constituyen una amenaza para los que se incorporan a los mismos”. “Estos grupos practican serias amenazas y también lesiones contra sus propios miembros, como es habitual en las sectas, por ello es importante alertar sobre estos grupos”, añadió.
Por su parte, el comandante Javier Rojero, jefe de Información y Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid explicó cómo funciona la banda y alertó de que “es un grupo que es violento pero que la mayor parte de la violencia la aplica en sí mismo como un modo de disciplina interna”.
En este sentido, aseguró que “funcionan a través de castigos con sus coros” y que fue la forma de ejercer estos castigos la que ha dado nombre a la operación. Al parecer, “el afectado se pone en medio del grupo y los demás le dan latigazos, llegando incluso a de 133 series de latigazos”, acompañado de su correspondiente rito.
En los registro, la Policía intervino armas de fuego y armas blancas, munición, bates de béisbol, cocaína, 2.000 euros en efectivo y abundante documentación.