El oficio más dulce del mundo
La Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca del Cabildo de Gran Canaria, que dirige José Miguel Álamo, ha otorgado al apicultor teldense José Florido Santana, propietario de “Colmenar Florido”, el primer premio de Miel de Costa y mención especial a la Mejor Miel de Gran Canaria de este año, tras el concurso celebrado recientemente en el Centro Cívico de Valsequillo, muestra a la que concurrieron 34 mieles elaboradas por profesionales procedentes de los municipios de Agüimes, Ingenio, Las Palmas de Gran Canaria, Gáldar, La Aldea de San Nicolás, Santa Lucía de Tirajana, Telde, Valleseco y Valsequillo.
José Florido Santana, que ostenta también la presidencia de la Sociedad de Apicultores de Gran Canaria, obtiene de media anual unos mil kilos de miel y productos derivados de las colmenas, pese a que, como afirman todos sus compañeros participantes den este séptimo concurso insular, la sequía ha hecho auténticos estragos en sus instalaciones este año, disminuyendo la producción de manera sensible, al tiempo que ha bajado también la calidad de sus productos. La cata de este año que, siguiendo la iniciativa del Cabildo grancanario, ha empezado a rotar por los municipios isleños, concedió también premios a las mieles presentadas por los apicultores profesionales Antonio Jiménez, Julio Sánchez, Antonio López, Manuel Sánchez y a la Asociación de Apicultores Ansite y a los aficionados, Luis Pérez, Carmen Rosa Florido, Pedro Domínguez, Antonio Corujo, Oliver García, Fernando León, Juana Acuña, Natividad Bordón y Beatriz Bordón.
El consejero insular, José Miguel Álamo, destaca el enorme esfuerzo realizado por profesionales y aficionados para acudir con sus productos a esta cata anual, que se inscribe en el proyecto de la institución insular de divulgar la calidad de las producciones que se elaboran en Gran Canaria, un empeño donde también se quiere involucrar a la Cámara de Comercio de Las Palmas, con la que ya Álamo ha establecido contactos con el fin de consensuar una marca de calidad para la miel y otros productos isleños.
Medianías
Según Florido Santana, “La sequía ha hecho estragos este año en zonas de costa y cumbre, salvándose las medianías, donde no ha habido necesidad de dar alimentación extra a las colmenas. Compañeros del norte de la isla sí que me comentan que han tenido que recurrir a una mezcla alimenticia complementaria para las abejas, ya que éstas, a pesar de que la necesidad las ha llevado a los jardines y a plantas que otros años ignoran, se han visto incapacitas para encontrar el alimento necesario para vivir y producir en condiciones.
En las medianías, sobre todo en el Barranco de los Cernícalos, Montaña de Las Palmas, Las Vegas o Fontanales, la producción ha sido más alta que en el resto, manteniéndose la calidad de los productos, teniéndose que destacar que las plagas, como la varroa o las avispas asesinas están manteniéndose en un estado de contención, la primera con tratamiento, y la segunda, por estar esos animales ahora en periodo de cría, aunque esperamos que se tomen las medidas pertinentes para atenuar sus dañinos efectos sobre nuestras colmenas“.
A pesar de la sequía, Florido espera mantener la media de mil kilos de miel al año que han venido produciendo hasta la fecha su colmenas, a lo que hay que añadir los frascos de polen, jalea real, propóleo, cera e hidromiel que se derivan del increíble trabajo de estos insectos. El secreto de este apicultor teldense está en un trabajo continuo, un estudio indesmayable de las características de sus animales, sus cuidados y tratamiento de plagas y, ya en lo comercial, mantener una red de distribución constante, sin colmatar los mercados y extendiendo su oferta al resto del Archipiélago, especialmente a la isla de Fuerteventura.
