Las 76.000 vacunas contra la gripe no han llegado a Canarias
El Director General de Salud Pública, José Díaz-Flores, ha denunciado en un comunicado la “pasividad del suministrador Alentia de vacuna contra la gripe a la hora de encontrar soluciones ágiles y efectivas ante el problema generado por la decisión del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales Social e Igualdad de inmovilizar las vacunas fabricadas por Novartis”.
Díaz-Flores y el jefe del Servicio de Epidemiología, Domingo Núñez, han informado este miércoles en rueda de prensa sobre la situación de la vacunación contra la gripe en Canarias, interrumpida justo en el día de su inicio, el 25 de octubre, por la decisión del Ministerio de Sanidad, Seguridad Social e Igualdad, de inmovilizar las vacunas contra la gripe fabricadas por Novartis.
Durante las reuniones extraordinarias de la Comisión Nacional de Salud Pública, se buscó la colaboración interautonómica que, finalmente, propició la decisión de enviar 76.000 vacunas a Canarias procedentes de otras Comunidades Autónomas, que inicialmente el Ministerio de Sanidad informó que estarían en Canarias este miércoles día 7 de noviembre, “lo que evidentemente no se ha cumplido”.
La llegada de esta y otras remesas permitiría proseguir la actividad vacunadora siguiendo criterios de priorización de los grupos de riesgo.
Se pretende que con este envío inicial de vacunas contra la gripe y las posteriores remesas, se alcancen las dosis de vacuna necesarias para Canarias, estimadas en torno a las 200.000. Tampoco está descartada la desinmovilización de las vacunas de Novartis, como han decidido varios países europeos. Las vacunas siguen almacenadas a temperatura de entre 2 y 8 grados centígrados en las cámaras frigoríficas de dependencias del Servicio Canario de la Salud.
Medidas legales
“Canarias está estudiando emprender las medidas legales que correspondan por el incumplimiento del contrato por parte del suministrador Alentia”, contratado a través del Acuerdo Marco impulsado por el Ministerio de Sanidad, Seguridad Social e Igualdad, ya que “considera que no se ha respetado la fecha inicial de entrega de las vacunas y ha habido, además, una obvia pasividad por parte del proveedor de las vacunas para buscar soluciones ágiles ante la situación sobrevenida por la inmovilización”, afirma el comunicado.
A pesar de la coordinación entre el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas tras la inmovilización, “no se ha conseguido la agilidad necesaria que la situación requería para resolver el problema”.
Díaz-Flores señaló que Canarias “nunca antes había tenido un problema parecido con al compra de vacunas, que surge la primera vez que acude a un procedimiento centralizado de adquisición en lugar del procedimiento de concurso propio que se venía celebrando cada año”.
La decisión de adherirse al Acuerdo Marco se tomó porque “se suponía que aportaba ventajas económicas pero también de seguridad”.
El director general de Salud Pública indicó que se ha pedido al Ministerio de Sanidad, Seguridad Social e Igualdad “mayor contundencia y firmeza para solucionar el problema causado por su decisión de inmovilizar las vacunas de Novartis, ya que la coordinación de las actuaciones corresponden al mencionado Ministerio. Por ello, se le ha instado también a que tome las medidas legales que correspondan contra la empresa Alentia suministradora de la vacuna”.
El mismo día 25 de octubre, en coordinación con el Servicio de Información al Ciudadano 012 y las gerencias de Atención Primaria, la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias había detenido la actividad vacunadora desde primera hora de la mañana, cuando se tuvo conocimiento de la reunión urgente del gabinete de crisis de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios, tras las inmovilizaciones de la vacuna contra la gripe fabricada por Novartis decididas en días anteriores por varios países europeos.
La decisión del Ministerio supuso la inmovilización en Canarias de 250.000 vacunas contra la gripe -adquiridas por un importe de 972.440 euros- para garantizar la protección de las personas con riesgo de padecer complicaciones: mayores de 65 años, enfermos crónicos de cualquier edad, embarazadas, personas con obesidad mórbida (IMC mayor de 30), cuidadores de mayores y enfermos crónicos y trabajadores de profesiones que resultan esenciales para la comunidad como policía, bomberos y, especialmente, personal sanitario.
Díaz- Flores indicó que ese mismo día 25 de octubre en el que el Ministerio comunicó su decisión de inmovilizar las vacunas contra la gripe fabricadas por Novartis, se ordenó la paralización inmediata de la campaña publicitaria de incentivación de la vacunación que se presentó el pasado 18 de octubre y que había comenzado a emitirse dos días antes en distintas cadenas de televisión y radio, así como en medios digitales e impresos.
Únicamente se mantuvo temporalmente la publicidad exterior (vallas urbanas y traseras de guaguas), a la espera de la evolución de la situación dado el coste económico de la retirada, y que podía tenerse que revocar en cualquier momento.
Desde esa fecha se han celebrado varias sesiones extraordinarias de la Comisión Nacional de Salud Pública para valorar la situación tras la inmovilización provisional y para buscar soluciones que paliaran la situación de paralización de la vacunación contra la gripe en las comunidades autónomas que se han visto más afectadas por la inmovilización: Canarias, Murcia y las Ciudades Autónomas de Ceuta y Melilla, así como en menor medida Extremadura, Andalucía, Castilla León, Galicia, Asturias y Baleares.
La situación climatológica de bonanza de las temperaturas vividas en estos días y la especificidad de la onda epidémica de la gripe en Canarias, que tradicionalmente se inicia retrasada respecto a la de la península, ha dado ua la Consjeria “un cierto respiro”, pero “el tiempo corre y hay que agilizar el proceso para que todas las personas en riesgo de padecer complicaciones por la gripe puedan ser vacunadas a tiempo”.