Votar es gratis

Es posible que la pregunta más formulada estos días en las reuniones de amigas sea “¿vas a ir a votar?”. Para las mujeres jóvenes españolas se trata de una pregunta llena de significante y significado. Ir a votar se ha convertido en una necesidad. Nos lo preguntamos unas a otras como una llamada de auxilio cuando crees que la otra parte no te está escuchando.

Para las mujeres españolas es una necesidad ir a votar el próximo domingo. Para las jóvenes, precarias, en desempleo, feministas, para aquellas que pertenezcan al colectivo LGTBI, para las amas de casa, para las que trabajan en negro, para las kellys, para las que creen que la lucha feminista es viejuna. Incluso para las que se creen que son parte de la clase media y votan a Ciudadanos por liberales en lo económico y “progresista en lo social”. Porque en las próximas elecciones las mujeres nos jugamos defender derechos que creíamos conquistados. Por eso muchas estábamos pendientes del debate para deliberar, ansiosas por escuchar a los candidatos, antes de votar.

El debate decisivo

La sobreactuación de Alberto Carlos Rivera y los conflictos continuos entre Sánchez, Casado y Rivera hicieron vencedor por descarte a Pablo Iglesias. El candidato de Unidas Podemos no fue brillante. Sin duda, ha tenido intervenciones mucho mejores. Pero su precisión a la hora de responder a los temas, sin escenificaciones ni gráficos, lo hicieron ganador. En un segundo puesto quedó Pedro Sánchez, que estuvo más agresivo que en el debate de RTVE.

Los grandes temas como la sanidad y la educación quedaron opacados por Torra, los nacionalistas, los casos de corrupción y el y tú más. Por segunda vez daba la sensación de que el debate electoral no había resuelto dudas a los ciudadanos. Los candidatos se lanzaron falsedades y acusaciones utilizando frases manidas sobre el empleo, la precariedad o los falsos autónomos.

Sin embargo, a pesar del bochorno, el papiro de Rivera, el intercambio de libros, los marcos con fotos, los gráficos, las interrupciones, nos pusieron frente a lo que nos enfrentamos. El motivo de estas elecciones es frenar al trifachito. Porque tal y como dijo el hijo de una madre y padre de una hija en el debate de Atresmedia, “Votar es gratis, pero puede salir muy caro”.